Algún miserable hijo de puta amigo del GOBIERNO de Israel hoy?

[Baku]

Y seguramente algún etarra también.

[Baku]

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https://twitter.com/Guerraeterna/status/1775965425626407348

[javi]

Sobre la petición para dejar de vender y comprar a Israel:

https://www.elconfidencial.com/empresas/2024-04-25/embargo-militar-espana-israel-compra-venta-proyectos_3873036/


Por Jesús M. Pérez Triana
25/04/2024 - 05:00

El conflicto en Gaza está haciendo que cada vez más voces en la izquierda pidan un boicot a la venta de material militar a Israel. Sumar le exige al PSOE una actitud más frontal ante la guerra y ha pedido en el Congreso "un embargo total de compra y de venta de armas [a Israel], romper las relaciones internacionales, sentar a los responsables [del conflicto] ante la Corte Penal Internacional y reconocer urgentemente el Estado palestino". La relación militar entre España e Israel es meramente industrial, así que analizamos cómo impactaría esto en las ventas, las compras y los proyectos conjuntos.

El panorama que nos revelan las datos es que Israel nunca ha acudido a España para dotar a sus fuerzas armadas con equipo crítico, mientras que España sí confía en material de la potente industria de defensa israelí. Si se llegara a concretar una ruptura de la cooperación militar, el impasse podría poner en un aprieto algunos proyectos relevantes del Ejército de Tierra.
Una medida simbólica

La idea de someter a Israel a un embargo de armas español tiene un carácter meramente simbólico. Israel es un país que ha buscado durante toda su existencia la autosuficiencia en materia de industria de defensa y solo acude fuera de sus fronteras para dotarse de algunos sistemas o piezas muy específicos a proveedores en países con los que tiene vínculos especiales.

El caso más evidente en la lista de los proveedores selectos de Israel es Estados Unidos, al que le compra todo aquello que no puede producir localmente, como aviones y helicópteros de combate, además de ser socio tecnológico en programas como el sistema de defensa antiaéreo Honda de David. Es el caso también de Alemania, al que Israel compra corbetas y submarinos a precios especiales para reparar la deuda histórica. Por último, tenemos a Italia, donde Israel compra aviones y helicópteros para formar pilotos. No son sistemas críticos que un súbito embargo a la exportación de repuestos dejaría sin capacidades letales a la fuerza aérea israelí. Pero forma parte de un acuerdo por el que Italia le compra a la industria israelí aviones de alerta temprana e inteligencia.

Esos países no son sólo son proveedores de las Fuerzas de Defensa de Israel, sino que sus fuerzas armadas además se ejercitan juntas. En el caso de Italia y Grecia, hemos visto ejercicios donde aviones de combate israelíes han atravesado el Mar Mediterráneo en lo que podría ser ensayos de un ataque a Irán.

España está fuera de esa categoría de países proveedores y tampoco tiene una relación especialmente estrecha con Israel. En parte porque los productos estrella de la industria española, como las fragatas de Navantia o los aviones de transporte militar que Airbus fabrica en Sevilla, nunca han estado en la lista de la compra israelí.

Cuando se realizan citan datos sobre transferencia de arma militar, es frecuente leer que España vende "bombas, granadas, torpedos, minas, misiles, cartuchos y demás municiones y proyectiles, y sus partes, incluidas las postas, perdigones y tacos para cartuchos" a Israel. En realidad, esos informes de exportación se refieren a la existencia de productos que entran en la categoría de material militar. Cuando se repasa al detalle, nos encontramos mucho material de doble uso que no necesariamente tiene carácter letal; o piezas y componentes específicos que proveedores españoles venden a la industria israelí.

Si repasamos las cantidades de los contratos, considerando las cifras que se manejan en la industria de defensa, podemos concluir que las exportaciones españolas a Israel son irrelevantes. En cambio, si vemos las compras españolas a Israel nos encontramos un proveedor significativo con el que, además, cuenta para el desarrollo de proyectos armamentísticos futuros muy relevantes.
Compras de urgencia para Afganistán

Cuando España desplegó sus tropas en Afganistán y sufrió bajas por culpa de las minas y artefactos explosivos plantados por los talibán tuvo que realizar compras con cierta urgencia. Se buscaron vehículos con mayor resistencia que los Vamtac y los BMR empleados por el Ejército de Tierra. Se acudió entonces al mercado comprando los IVECO LMV italianos y los RG-31Mk5E sudafricanos. En el segundo caso se trata de un vehículo a prueba de minas con casco resistente en forma de "V" y centro de gravedad alto basado en la experiencia sudafricana en las sabanas de Namibia y Angola. El RG-31 español fue dotado de un montaje teledirigido de origen israelí Rafael Mini Samson, dotado de ametralladora de 12,7mm.

Aquella no fue la única compra a la industria israelí para cubrir huecos de forma expedita. España contaba por entonces con un dron de producción nacional, el Sistema Integrado de Vigilancia Aérea (SIVA). Un sistema que le llevó al Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (Inta) cerca de veinte años desarrollar, llegando a requerir de los servicios del campeón nacional de aeromodelismo porque el prototipo no volaba bien. Cuando llegó la hora de la verdad, a nadie se le ocurrió llevar el SIVA a Afganistán, sino que nuevamente se acudió al mercado para comprar un aparato que fuera fiable.

El Ejército de Tierra adquirió cuatro drones Searcher Mk.IIJ de Israel Aerospace Industries por 17 de millones de euros a un consorcio en el que participaron Indra y EADS, nombre de la rama militar de Airbus en aquel entonces. Los aparatos sirvieron en Afganistán entre 2008 y 2014, donde al menos dos se perdieron en accidentes. Las pérdidas en Afganistán llevaron a comprar un nuevo aparato que, con las modificaciones solicitadas por España, fue denominado Searcher Mk.III. Tras el repliegue español, participaron en actividades como la vigilancia de los montes en la campaña contraincendios en la provincia de León durante los meses de verano de 2017. Al año siguiente se firmó un contrato con la empresa israelí Malat, una división de IAI, la modernización de los dos aparatos supervivientes.

Por último, la necesidad de proporcionar a las fuerzas desplegadas en Afganistán de un arma de apoyo embarcada llevó a buscar en el mercado un mortero que pudiera emplearse desde un vehículo todoterreno Vamtac. El modelo elegido fue el mortero Cardom de 81mm producido en Israel por la empresa Elbit. Se trata de un arma que se controla desde una pantalla táctil en la cabina del vehículo. Una vez seleccionado el objetivo, el tubo del mortero apunta automáticamente. Entonces, el servidor del arma montado en la plataforma del vehículo introduce el proyectil por la boca del mortero y está listo para disparar.


Vehículos todoterreno blindados, drones, montajes remotos de ametralladora y morteros embarcados son cuatro sistemas que hoy en día la industria de defensa española es capaz de producir. Así, la empresa Escribano produce una amplia familia de montajes remotos de ametralladora empleados en diversos vehículos que incluso cuenta con variantes navales. Y ahora las empresas españolas no producen uno sino dos modelos de mortero embarcado: el Expal Eimos y el NTGS Alacrán. Pero no es casualidad que cuando se acudió al mercado para adquirir con urgencia diferentes sistemas que ofrecieran prestaciones y fiabilidad aparecieran productos de la industria israelí entre los ganadores de los diferentes concursos.

Un roto considerable

La columna vertebral de la defensa contracarro en España es el misil Spike, diseñado en Israel por la empresa Rafael. El Ejército de Tierra adquirió 236 puestos de tiro y 2.360 misiles de la versión LR (Long Range) con un alcance de 4.000 metros, mientras que la Infantería de Marina adquirió 24 lanzadores y 240 misiles de la misma versión. Se trata de un moderno misil con capacidad dispara y olvida que permite al tirador no tener que seguir el vuelo del misil hasta el impacto. Además, le permite cambiar de blanco en pleno vuelo del misil.

Tampoco habría que olvidar que el misil Spike en su versión ER (Extended Range) fue elegido por el Ejército de Tierra para armar al helicóptero Tigre, cuyo futuro ha quedado en el aire a la espera de una decisión de los socios alemanes y franceses. El Spike ha sido un éxito de ventas e Israel lo ha exportado, en sus diversas variantes, a más de 30 países, de Chile a Corea del Sur y de Canadá a Australia, con acuerdos de producción en lugares como Alemania y Singapur. En España, la satisfacción con el misil Spike llevó en 2023 a firmar un segundo contrato por 168 puestos de tiro y 1.680 misiles adicionales de la versión LR2, compatible con la primera adquirida. Esta nueva versión presenta mejoras como un alcance extendido a 5.500 metros.

Otro sistema de origen israelí fundamental para el Ejército de Tierra es la familia de radio táctica definida por software E-LynX con la que se pretende modernizar los medios de mando y control. Se trata de un producto de la empresa israelí Elbit, que en España fabrican bajo licencia Telefónica y Aicox. Hasta ahora distintos modelos de la familia habían ganado tres concursos.

Uno es el de radio portátil (handheld) para ser empleado en despliegues en el exterior que se adjudicó en octubre de 2020. Otro es el de sistemas de comunicaciones para el futuro vehículo de combate de ruedas 8x8 Dragón, que se anunció en julio de 2021. Y el último, adjudicado en noviembre de 2022, está destinado a dotar de nuevos sistemas de comunicación a los carros de combate Leopard 2E y a los vehículos de combate de infantería Pizarro. La previsión era que los primeros equipos MCRT 7200 de la familia E-LynX llegaran en 2024 a las unidades.

El sistema de comunicaciones no es el único elemento de origen israelí en el programa Dragón. En noviembre de 2021, el consorcio que produce el vehículo firmó un contrato con la empresa Plasan para mejorar la protección del vehículo contra minas y artefactos, además de contra proyectiles de carga hueca, como los de las granadas RPG. Para esto último, el vehículo Dragón incorporará un sistema de rejas de Plasan denominado Hybrid Slat Fence.

Por último, no hay que olvidar que la integración del misil Spike en el Ejército de Tierra, como arma de defensa contracarro y como arma del helicóptero Tigre, llevó a que se eligiera el misil Spike para armar la torre que la empresa española Escribano desarrolló para el 8x8 Dragón. Así que tenemos que el blindaje, la radio y el armamento del programa estrella del Ejército de Tierra son de origen israelí.
El retorno de la artillería de cohetes

Acelerado por la guerra de Ucrania, el nuevo ciclo de actualización de las Fuerzas Armadas españolas viene a suplir viejas carencias de la defensa nacional. Entre las principales, cubrir el hueco dejado por la retirada de servicio de los lanzacohetes de artillería Teruel. El programa para comprar un sustituto se denominó Sistema Lanzador de Alta Movilidad (SILAM) y fue adjudicado en octubre de 2023 a un consorcio que toma el diseño israelí Puls para integrarlo y producirlo en España. El lanzador del cohete israelí fue adaptado a un camión Iveco, como pudimos ver en la feria Feindef 23. En el consorcio participan además Expal, GMV y Escribano, que producirán distintos elementos del sistema y lo adaptarán a las necesidades españolas.


De momento, no hay noticias de que en Israel hayan barajado las posibles represalias a un potencial embargo español o si podría tomar algunas medidas ante el anuncio de España de reconocer a Palestina como Estado.

La conclusión evidente es que si España sometiera la venta a Israel de material militar y sistemas de defensa a un embargo, las capacidades de las Fuerzas de Defensa de Israel para llevar a cabo su campaña en la Franja de Gaza o lanzar una nueva en el sur del Líbano no se verían en absoluto mermadas o reducidas. Pero si el Gobierno de Israel decidiera tomar como represalia la prohibición a sus empresas de la industria de defensa vender a España productos y servicios nos encontraríamos con importantes programas de armamento paralizados por la falta de elementos clave que obligarían a rediseñarlos o directamente a comenzarlos de nuevo.