los vómitos de akelarre

[45rpm]

Ocurrió hace unos 35 años, en la carretera de la llacuna a vilafranca. Una tí­pica escena costumbrista con mi padre lanzando su SEAT 1500 familiar a toda hostia por las reviradas curvas de la serra d´ancosa, mi hermano futuro bombero botando de emoción sobre el asiento trasero y supurando adrenalina por el chirrido de los neumáticos. Mi hermana a la izquierda le poní­a banda sonora de led zeppelin y esa cabezota que asoma por la ventanilla derecha volcada sobre el asfalto soy yo como siempre potando la coca de llardons del desayuno.

Ya enfilando la recta hacia vilafranca nos adelantó un 1430 trucado que tuvimos a rebufo durante todo el trazado de curvas, pero que aprovechó la recta para sacar los caballos de más. El pique vení­a de lejos. Adelantamiento limpio, creo que por ¿la derecha?, pero el desgraciado cometió el error de rubricarlo sacando í­ndice y meñique por la ventanilla, en acción que muchos años depués y muchos vómitos más tarde yo relacionarí­a con la tí­pica provocación areopagita, a que sí­, cara de conejo, ¿no te parece?.

El calentón de mi padre alcanzó al desgraciado ya en las calles de vilafranca, propinadole un clásico del macarrismo puro y duro, una maniobra muy aplaudida en el anfiteatro trasero excepto por el que ya saben, aún inmerso en sus pleitos con la cena del dí­a anterior. La maniobra, aprendida del Starscky y Hutch, hace así­. Clavas el auto en oblí­cuo delante de tu ví­ctima empotrándola contra la acera, te quitas la gafas, abres la puerta, corres hasta el 1430 sin que tenga tiempo de subir la ventanilla, metes la mano adentro, abres su puerta, agarras esa escoria por las solapas, de un tirón lo levantas afuera del habí­taculo protector, y resulta que el amigo conductor que esputaba y mandaba cuernos estaba contenido en un cuerpo al que le faltaban dos piernas. Mi padre sobresaltado soltó al hombre mi hermano se quedó por primera vezen su vida quieto, a mi hermana se le calló la música pero yo a lo mí­o, regurgitando una merienda rebelde de no sé cuando, creo que la coca de aní­s, nyam nyam... creo que voy llorar, un pañuelo, necesito una pañuelo.

[Lacenaire]

Es la escena más demencial que he leí­do en el foro en mucho tiempo.

[Gatinho]

creo que voy llorar, un pañuelo, necesito una pañuelo.

Yo también.

Grandioso.

[patillotes]

¿Quien decia que estamos en crisis?

[anantic]

Joder, lo único malo es que ocurrió hace 35 años... ¡yo no habí­a nacido y este ya estaba granado! ¡¿Cuántos me sacas?!

[Rufo]

¿Y qué importa la edad cuando el amor es puro?. Yo hace 35 años también estaba en disposición de potar.

[Glategoja]

¿Y qué importa la edad cuando el amor es puro?. Yo hace 35 años también estaba en disposición de potar.

Y yo, pero aún así­ no potaba. Blandengues, que sois unos blandengues.

[NubeBlanca]

Lo que se habrá gastado este hombre en el psicoanalista.

[yonodio]

¿Y qué importa la edad cuando el amor es puro?. Yo hace 35 años también estaba en disposición de potar.

Y yo. Que en aquella epoca hacer un viaje de 400km suponia una aventura de mas de 6 horas (con suerte).

[Dan]

Los 650 que me separaban de mi pueblo se repartí­an entre variadas siestas y alguna pelea con mi hermana (pocas, que entonces las madres sí­ arreaban, y arreaban bien). Bocadillos en apartados parajes de Castilla, qué bonito aquello. Una vez que llevamos al gato el hijoputa se subió a un árbol y después no querí­a bajar, y nos costó hora y media más el viaje. Glorioso.

Y cuando llegábamos al pueblo parábamos en algún sitio para adecentarnos, porque parecí­a que salí­amos de una pelí­cula de guerra. Repasábamos los nombres de las viejas del lugar para no quedar mal, y arriba.

[Gatinho]

Es cierto, mucha risa y tal, pero menudas odiseas resultaban aquellos viajes por la España democrática mas no de la CEE. Curioso, porque el mejor momento también lo pasaba yo en Castilla, que para algo es ancha, comiendo el bocadillo, o en el mejor de los casos las empanadillas, y eso que mis viajes duraban 1100 kilómetros y más de doce horas parando lo menos posible. Lo peor, que desde que tengo memoria hasta los ocho o nueve años siempre vomitaba dos veces por trayecto, fuera en el punto, época del año o sentido del viaje que fuera, eso no cambiaba.

[Didius]

Y yo. Que en aquella epoca hacer un viaje de 400km suponia una aventura de mas de 6 horas (con suerte).

Bueno, hace dos fines de semana bajé a Milán. 480 Km, de los cuales unos 300 transcurren por Suiza. 10 horas en la ida, 8 en la vuelta. Y el caso es que la venida a Tí¼bingen el primer lunes de Septiembre me llevó 5...

Si es que Africa empieza en los Pirineos Alpes

[45rpm]

en realidad ese relato es un refrito de tres episodios diferentes. Presencié la maniobra macarra pero la del tetraplégico me la perdí­, la cuento de oí­das. Un dí­a agarré a mi padre y le hablé de hombre a hombre, mira, esas tres historias por separado no marchan, estuvo de acuerdo y tergiversamos su memoria. En cuanto a la edad, no sé anantic, postulo que nací­ dos veces, si no he perdido la cuenta. Ahí­ fue mi madre quien consideró que mi más tierna infancia ni fu ni fa, esperaba más de mi, así­ que a los 3 repetí­ curso. A pesar de mi renacimiento de los mareos en auto no me quité, vomitaba siempre que podí­a. Con solo subir al 1500 la carga estática se me pegaba en la garganta y notaba mi estómago adherido a la base de mi lengua materna, en esa época todaví­a por normalizar. Me sabí­a la cantidad de curvas exacta entre la llacuna y vilafranca. Potar en la curva 34 en lugar de 31 como la semana anterior, me sabí­a a gloria y a progresar adecuadamente, lo digo con orgullo, nadie ha vomitado tantas veces por la catalunya profunda como yo, no sé si con arcadas góticas o pre-románicas.

[yonodio]

en realidad ese relato es un refrito de tres episodios diferentes. Presencié la maniobra macarra pero la del tetraplégico me la perdí­, la cuento de oí­das. Un dí­a agarré a mi padre y le hablé de hombre a hombre, mira, esas tres historias por separado no marchan, estuvo de acuerdo y tergiversamos su memoria. En cuanto a la edad, no sé anantic, postulo que nací­ dos veces, si no he perdido la cuenta. Ahí­ fue mi madre quien consideró que mi más tierna infancia ni fu ni fa, esperaba más de mi, así­ que a los 3 repetí­ curso. A pesar de mi renacimiento de los mareos en auto no me quité, vomitaba siempre que podí­a. Con solo subir al 1500 la carga estática se me pegaba en la garganta y notaba mi estómago adherido a la base de mi lengua materna, en esa época todaví­a por normalizar. Me sabí­a la cantidad de curvas exacta entre la llacuna y vilafranca. Potar en la curva 34 en lugar de 31 como la semana anterior, me sabí­a a gloria y a progresar adecuadamente, lo digo con orgullo, nadie ha vomitado tantas veces por la catalunya profunda como yo, no sé si con arcadas góticas o pre-románicas.

Seguro que tambien has disfrutado de los altos del Bruc, antes de la cosntruccion del tunel 

[Lapi_0]

Ní­simo, oigan.