Yo luché contra el fascismo - Santiago Carrillo

Iniciado por Pornosawez, Febrero 12, 2007, 01:06:40 AM

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Pornosawez

Santiago Carrillo, ex secretario general del PCE

“Rajoy, como los que echaban pestes contra la República e invocaban al Ejército para salvar España”

- ¿Cómo está viendo la actual situación de crispación polí­tica permanente y la inexistencia de consensos mí­nimos en temas de Estado entre los principales partidos?
El enfrentamiento polí­tico actual me hace pensar, a veces, que estamos en los años 30, porque la derecha de este paí­s ha cambiado poquí­simo. Siguen teniendo la misma mentalidad y las filias y fobias que tení­a la derecha en los años 30. Cuando llegan al extremo de la sinceridad, invocan los mismos dioses y demonios del 36: alguien que venga a salvar España, que se rompe o que se divide… es lo mismo.

-Digamos que a usted, lo de “España se rompe” y “España se rinde” no le parece novedoso ni digno de temor…
Me suena a música vieja, esos ataques a Cataluña y al Paí­s Vasco. Ahora no hay ataques directos al comunismo, porque representa muy poca cosa en España, ahora mismo, pero siguen en lo mismo: intentar tapar la boca a la izquierda. Con todo, a veces tengo la sensación de que nos hemos quedado dormidos y nos despertamos en los años 30. Dicho con sencillez, cuando habla Rajoy, recuerdo mi época juvenil, cuando era periodista y escuchaba los discursos de Gil Robles, Calvo Sotelo, del carlista Beúnza y de todos aquellos que echaban pestes contra la República e invocaban al Ejército para salvar a España. Afortunadamente hoy esas invocaciones no se pueden hacer directamente, pero hay quienes, como Pedro J. Ramí­rez, dicen cosas tremendas, como que si no se puede echar con los votos a Zapatero, habrá que buscar otra forma de echarle, o algo así­â€¦ Se escuchan unas cosas…

-¿A qué cosas se refiere?
Escuchamos al alcalde de Alhaurí­n, que es del PP, y que cuando le llevan a la cárcel por robar, presuntamente, dice que eso es una agresión al PP y que hay que hacer una revolución. El portavoz de la AVT, José Alcaraz, ha hablado más de una vez de desobediencia civil. Y para completar el cuadro de los años 30, habrí­a que dar una pincelada con los obispos que acuden a las manifestaciones y me recuerdan al Cardenal Segura, en los años 30.

-Pues no ha dejado un colectivo sin mencionar. O tal vez, sí­: los jueces…
Es que, si lo comparamos con los años 30, la actitud de los jueces es una novedad, porque hoy, un sector importante de la magistratura se ha convertido en un ala marchante de la derecha española y está secundando al PP en sus objetivos polí­ticos. Lo único que ha quedado claro es que la justicia es independiente del gobierno del PSOE, de la mayorí­a parlamentaria, pero no del PP. Muy por el contrario, la reciente recusación de Pérez Tremps en el Tribunal Constitucional, por ejemplo, es escandalosa. ¿Y qué decir con la situación del CGPJ, que, constitucionalmente, deberí­a haber sido renovado ya, pero el PP se niega a hacerlo, para mantener su mayorí­a? Si este Parlamento nombrara a la mayorí­a de los magistrados, sus miembros serí­an mayoritariamente demócratas o moderados, pero no de extrema derecha, como ahora. Y los nombrados por el PP siguen actuando como si nada hubiera cambiado. Si leemos la Constitución, nos preguntamos: ¿cómo es posible que estos señores sigan tomando decisiones como si no hubiera pasado nada? No soy jurista, pero todo esto me parece un escándalo.

-¿Y qué solución ve a esta situación que describe?
Sólo una: que los partidos democráticos que están en el Parlamento se aprieten el cinturón y luchen contra esa situación. Frente a las mentiras, que recuperen la verdad y no tengan miedo de acusar a la derecha por las tropelí­as que está cometiendo. Esto en primer lugar, pero a continuación, sólo hay una ví­a para acabar con todo este caos: conseguir que el PP se dé un batacazo en las elecciones. No hay que achantarse frente al PP; sino mantenernos firmes ante esta actitud poco democrática del PP.

-También cabe la posibilidad de que las próximas elecciones generales las gane el PP, según apuntan algunas encuestas ¿Qué pasarí­a entonces?
Si gana el PP, esta gente como Rajoy, Acebes, Zaplana y Aznar, los neoconservadores, puede ser una reproducción de los que ocurrió en otros tiempos y no quiero nombrar, que provocó la Segunda Guerra Mundial y mucho sufrimiento.

-Puestos en comparaciones y referencias históricas, Aznar, en cambio, compara la supuesta debilidad y condescendencia del gobierno de Zapatero para con ETA y los nacionalismos con la “paz con honor” obtenida por Chamberlain, que dio paso a la invasión de Polonia y a la Segunda Guerra Mundial…
Pues si hubiera que buscar similitudes históricas, los neocon actuales no pueden compararse con quienes, en los años 30, luchamos y combatimos al fascismo y que apostábamos por batirnos con Chamberlain, para frenar al fascismo.

-¿Cómo interpreta usted el fracaso del proceso de paz en el Paí­s Vasco?
Pues mire usted, ha resultado que el perí­odo en el que se trataba de dialogar sobre el proceso de paz ha sido más duro que cuando no habí­a negociaciones de paz. Y eso ha sido un éxito del PP y parte de la magistratura, que han logrado maniatar al Gobierno. Aznar, en 1998 y 99, excarceló presos de ETA, acercó a más de un centenar al Paí­s Vasco y llamó a ETA Movimiento Vasco de Liberación Nacional. Ahora no ha ocurrido nada de eso.

-Zapatero no contaba con el apoyo del PP y Aznar sí­ tuvo el del PSOE ¿Cree que, de haberlo tenido, hubiera hecho lo mismo que Aznar?
Yo lo que digo es que si no se podí­a negociar nada con ETA, no tení­an que haberse metido en ninguna negociación, pero si se meten, desafí­en al PP, porque los populares van a atacar a Zapatero haga lo que haga.

-¿Cree que el gobierno ha sido demasiado blando ante el PP?
Creo que se ha resentido ante la presión del PP y ha dudado y vacilado, ante algunas voces dentro de su partido.

-¿Con el primer partido de la oposición y la AVT en contra se puede llevar a cabo un proceso de paz?
Pues si no se puede resistir esa presión, no se inicia ningún proceso de paz. Pero si se inicia, hay que hacerlo con todas las consecuencias, porque si al final se derrota a ETA y se consigue la paz, eso merece la pena. Pero no hay que pensar en rendiciones incondicionales…

-¿Qué condiciones se puede ofrecer a ETA si deja definitivamente las armas?
Mire, lo que no hay que hacer es creer la gran mentira de que se puede derrotar a ETA, sin más. ¡Llevamos 40 años luchando policialmente contra ETA y conforme se detienen etarras, surgen nuevas generaciones de jóvenes dispuestos a reemplazarlos! Una de las grandes mentiras del PP es hacer creer a los ciudadanos que, lo que no ha dado resultado en 40 años va a funcionar ahora, porque lo dicen ellos. Pero es que ellos, concretamente este pollo, Acebes, era el ministro del Interior cuando se produjo el atentado más salvaje de nuestra historia ¡Y él estaba mirando para otro lado y ni siquiera quiere enterarse de quiénes fueron los verdaderos autores! ¿Con qué cara dice este hombre que el PP sabe cómo luchar contra el terrorismo, si tenemos casi 200 muertos a causa de aquel atentado? Acebes será buen secretario general del PP, pero como maestro de la lucha antiterrorista ¡ni hablar!

-¿Siguió la última manifestación, celebrada en Madrid, contra la negociación con ETA y contra la polí­tica antiterrorista del gobierno, en la que se corearon en algunos sectores gritos de “Zapatero, con tu abuelo al agujero"?
Sí­. Y cuando oigo cosas así­ me pregunto a qué espera la justicia, supuestamente tan implacable, para actuar contra quienes profirieron esos gritos. Pero esos gritos no los han dado sólo en esa manifestación, sino en todas las que ha organizado en Madrid el PP, por persona interpuesta: en este caso, el Foro de Ermua y en los anteriores, la AVT. Creo que habrí­a que tomar medidas para que no ocurran estas cosas. En esa manifestación hubo otros gritos, con despliegue de banderas y con el ritmo nacional, ellos decí­an “los nacionales somos nosotros”. Y es verdad. Esos son los nacionales que hicieron la guerra contra la República. ¡Eso es franquismo puro! Esa es mi impresión. Tratan de monopolizar himnos, sí­mbolos y banderas contra la polí­tica democrática.

-¿Qué opina de toda la polémica suscitada por el preso de ETA Iñaki De Juana Chaos?
Mire, en primer lugar hay que decir que no puede hacerse pasar por el oprimido y el violado, porque no es así­. Ha asesinado y ha cumplido una condena de 18 años. Es una larga condena. Y lo digo porque yo estuve un año y medio en la cárcel… ¡no quiero ni pensar lo que deben ser 18 años seguidos! En todo caso, cumplida esa pena, deberí­a haber salido. Y posiblemente hasta se hubiera reinsertado, pero con esta medida se le ha convertido en mártir. Y si muere, puede producirse un hecho muy grave. Pero si lo que se quiere es que este hombre se muera en la cárcel, que pidan abiertamente la pena de muerte ¿no? Por cierto, ahora resulta que el PP también está culpando al gobierno de la entrevista que apareció en el Times.

- Se supone que la policí­a que vigilaba la habitación del hospital no interceptó la entrada de una cámara de fotos…
Pues yo le digo que yo tengo fotos de cuando estaba en la cárcel. Y entonces no estaba permitido hacerlas… No hay forma de evitar eso. Y menos en un sistema democrático.

-Casi 71 años después de que estallara la Guerra Civil, la elaboración de una Ley para la Memoria histórica y la restitución moral de las ví­ctimas del franquismo ha enfrentado a PSOE y PP y no acaba de gustar a los socios del gobierno ¿Le sorprende o le indigna esa situación?
La Ley de Memoria Histórica deberí­a anular todas las sentencias de los tribunales especiales de Franco. Y también reconocer el mérito de los republicanos que cayeron defendiendo el régimen legal, así­ como permitir que los restos mortales que ahora yacen en trochas y cunetas fuesen enterrados en camposantos. Eso serí­a suficiente, pero parece que la ley no lo resuelve.

-¿Se abren heridas, como dice el PP, con esta ley?
Es cierto que se desatan algunas pasiones, pero la cosa es clara: ¿qué cristiano puede negarse a que reciban sepultura quienes están en las trochas, en los caminos, etc.? ¿Qué problema hay en que sus familiares puedan ir a visitarles a sus tumbas?

-¿Y qué opina de que el gobierno argumente dificultades técnicas para no anular todos los juicios?
Es que ahora no se puede revisar caso a caso. Hay que anular todos los juicios, porque se celebraron contra gente que defendió el régimen legal. Anularlos es cuestión de unos minutos. No deberí­a haber tanto problema. Pero se ha formado tanto lí­o porque el PP lo ha utilizado contra el gobierno, igual que ha hecho con los matrimonios gays, con las células-madre, el divorcio…¡todo vale!

-Usted estuvo en el ojo del huracán cuando, coincidiendo con un homenaje que le hicieron, parece que le “regalaron” la retirada de una estatua de Franco en Madrid…
Pues no tuve nada que ver en eso. Me enteré cuando salí­a del homenaje. Pero la pregunta no es por qué la retiraron entonces sino ¿por qué no la habí­an retirado antes? Dicen quienes se oponen a la retirada de esas estatuas que forman parte de la historia, pero es que, en Madrid, los republicanos estuvieron cerca de 3 años resistiendo el ataque de las tropas golpistas. Y si está la estatua del General Franco, también tendrí­a que estar la de Negrí­n, la del General Miaja, el General Rojo, etc. Si hablamos de historia, deberí­a estar otra gente, que también forma parte de nuestra historia. Pero ahora sólo hay imágenes de un lado: el de los vencedores.

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SI ALGÚN DíA, LOCO O CANALLA ...



Mejor que nadie, Martí­n Amis ha alzado acta de este estupor, que es el de los de mi edad que se niegan amor irremediablemente imbéciles, irremediablemente cómplices. El libro se llama Koba el terrible, en referencia al apodo familiar de Stalin. Su subtí­tulo es "la risa y los veinte millones". Los veinte millones son los asesinados, con planificación metódica, por un Stalin que, desde luego, no estaba loco.

La risa, o la obscena sonrisa complaciente, es la que seguimos exhibiendo, en la alegre y confiada Europa, ante el relato de aquel tiempo aberrante.

Y es verdad que es la pregunta más grave acerca de la distorsión mental en la cual vivimos los hombres de final del siglo pasado y del inicio de éste, no puede ser otra que ésta: ¿qué odiosa perversión nos permite ser, a un tiempo, dignamente implacables con los genocidas hitlerianos y untuosamente benévolos con los genocidas stalinianos?

Porque esos veinte millones de asesinados, a los que Amis se refiere, lo fueron por Stalin, sí­. Pero también, y esencialmente, por la bien jerarquizada tropa de asesinos profesionales que, bajo el control directo del GPU y la NKVD, tejieron el nervio de acero de Komintern y Kominform: aquellos "hombres de una materia diferente", que, en torno al dictador georgiano, desplegaron la mayor red de crimen polí­tico que ha conocido la historia moderna (escribo "la mayor", porque, por fortuna para Europa, el ciclo exterminador del nazismo fue mucho más breve en el tiempo).

Aquellos gigantes, a un tiempo desmesurados y monstruosos, de los que diera cuenta la primera gran novela sobre la matanza en curso: El cero y el infinito de Arthur Koestler, quien dio a su versión inglesa otro tí­tulo más preciso: "Midnight at Noon": porque eso era, eso es, sin duda, el stalinismo; decir que es medianoche en pleno mediodí­a. Y que todos te crean.

Si nos cruzáramos hoy a un tipo que hubiera ejercido de Gauleiter de las SS en Auschwitz, lo más amable que harí­amos serí­a escupirle a la cara.

No cruzamos con don Santiago Carrillo y le hacemos un homenaje nacional, con participación de lo más granado (de lo más podrido) de la polí­tica española: Barrionuevo, Corcuera y alto comisionado de las ví­ctimas del terrorismo, incluidos. Nadie podrá negar la admirable coherencia estética de la foto de familia. La ética, tampoco.

Santiago Carrillo. Hay que leer la ruda desnudez de la documentación contenida en el imprescindible Miseria y grandeza del PCE, 1939-1985 de Gregorio Morán, para percibir el grado de horror del personaje. El libro fue publicado en 1986 y desapareció casi inmediatamente de las librerí­as. Los documentos de los que en él da cuenta Morán ya no son accesibles: fueron muy profesionalmente depurados cuando alguien, en Madrid, se apercibió del alto riesgo polí­tico de lo allí­ contenido. Por fortuna, existen los archivos del KGB. Y la sección Carrillo en ellos.

"Si alguna vez yo me volviera loco o canalla, lo que creo que no sucederá ..." voz tonante de Santiago Carrillo, aniquilando a su predecesor Uribe en el Pleno del Buró Polí­tico de Bucarest. Abril de 1956.

Nace una estrella del post-stalinismo. No, loco no lo fue nunca; serí­a un excesivo consuelo para lo que hizo. ¿Canalla? ¿Qué aparatchiki comunista que sobreviviera indemne alas purgas de stalinismo y poststalinismo en esos años no lo fue?

No estaba loco el crí­o de apenas veinte años, a quien los soviéticos encargaron la matanza masiva de los detenidos en Madrid ante el avance franquista. Cinco mil, en Paracuellos fueron ejecutados por Carrillo; de todas las edades y condiciones; sin trámite judicial alguno; en esa amalgama de cuerpos anónimos y barro de fosa común, que sella con su infamia indiferente las prácticas polí­ticas más definitorias del siglo veinte: de Auschwitz a Kolyma.

No. Loco no, el combatiente stalinista que, aún no cumplidos los treinta años, procede a depurar -con la ayuda de su entonces aún colega Claudí­n- a todos y cada uno de los viejos dirigentes que se interponen en su avance hacia la Secretarí­a General, en esos que Morán llama los "años de plomo de la era staliniana en el PCE".

El que sobrevuela los procesos del "Complot del Lux" (eco en la organización española de las purgas stalinianas de posguerra, que aniquilaron, en Siberia, a toda una generación de comunistas, la que se habí­a jugado la vida en la segunda guerra mundial).

El ejecutor de la atroz venganza sentimental de Dolores Ibarruri contra su ex amante Antón, convertido, tras su abandono marital, en agente fascista infiltrado, y condenado, bajo supervisión personal de Ibarruri y control polí­tico de Carrillo, a trabajos forzados en Polonia.

El comanditario del asesino del incómodo lí­der comunista Trilla en Vallecas. El maquinador de las entregas de Quiñones, Monzón y Comorera a sus torturadores y ejecutores.

El liquidador de los estúpidos idealistas que seguí­an empecinados en una guerrilla que Moscú condenaba ...

Nada loco, el hombre que, tras romper con los soviéticos, que tratan de darle un golpe interno en la dirección del PCE cuando lo del 68 checo, pasa hacerse financiar -así­ seguirá durante los años setenta- por la flor y nata de la democracia mundial: el coreano Kim-Il-Sung y el rumano Ceaucescu ... Grandes tipos. Grandes amigos. Ambos.

No. Ni un ápice de locura hubo en la vida tenebrosa de Santiago Carrillo. Crimen, sí­; todo. Cinismo, sí­; todo. ¿Traición ...? - La verdad es que no hay palabras para describir la capacidad de doblez del personaje: superviviente nato, al precio de pasar por encima de los cadáveres de sus más í­ntimos: Claudí­n y Semprún incluidos.

Fue un polí­tico. En la más odiosa acepción del término. Hoy es una piltrafa fí­sica. Moral, lo fue siempre.

Pero somos así­ de raros, los humanos. A un Gauleiter de las SS, le escupirí­amos a la cara. Como mí­nimo. Al viejo predador staliniano, le rendimos tierno homenaje.

Encantador viejecito. Eichmann, de haber sobrevivido, se le parecerí­a mucho.

Gabriel Albiac es filósofo y escritor.


"España es el paí­s donde más fácilmente se puede hacer uno rico"

Carlos Solchaga

Belial

No estaba loco el crí­o de apenas veinte años, a quien los soviéticos encargaron la matanza masiva de los detenidos en Madrid ante el avance franquista. Cinco mil, en Paracuellos fueron ejecutados por Carrillo; de todas las edades y condiciones; sin trámite judicial alguno;

¿Ves? Ya sé que es un detalle tonto, pero el hecho de manipular los datos y agrandar la cifra dos veces y media, ya hace sospechosa el resto de la retahí­la de afirmaciones de Albiac.

El ejecutor de la atroz venganza sentimental de Dolores Ibarruri contra su ex amante Antón, convertido, tras su abandono marital, en agente fascista infiltrado

Otra chorrada. El hecho de que fuera un agente fascista inflitrado no tuvo mucho que ver, claro, sin duda es una atroz venganza sentimental. Estos comunistas, qué rencorosos, oye. Hasta pa follar.

Venga, Caver...

EreccionMatutina


Ictí­neo

Gabriel Albiac es filósofo y escritor.

La firma de Albiac nos recuerda que hubo un tiempo de filósofos ágrafos, muchos de ellos solitarios cabreros dotados para la zoofilia y el cinismo (a partes iguales)que dependí­an del sexo oral pues no sabí­an poner negro sobre blanco.

Gabriel Albiac es filósofo, escritor y ser humano.

Didius

Eso de que la polí­tica hace extraños compañeros de cama, es una verdad como un templo. Y curiosamente aquí­ queda muy clarito cuando clama conque la derecha intenta tapar la boca a la izquierda y luego menciona los ataques a Vascongadas y Cataluña. Señor Carrillo, ¿desde cuando los separatismo Vascongados o Catalanes están representados por formaciones de izquierdas?

Al final tení­a razón yo el otro dí­a con lo del odio visceral de la izquierda a cualquier cosa que se parezca a una idea de España. Los abuelitos de la cosa lo demuestran con esa desvergí¼enza tan propia de la edad.

Belial

Cita de: Didius en Febrero 12, 2007, 10:16:27 AM
Al final tení­a razón yo el otro dí­a con lo del odio visceral de la izquierda a cualquier cosa que se parezca a una idea de España.

¿De dónde deduces tú eso? Como mucho, a la idea de la España eterna de las esencias que enarbolan algunos como si se tratase de Tizona. Pero yo no leo que Carrillo odie visceralmente a España ni nada de eso.

pescadilla

Cita de: Didius en Febrero 12, 2007, 10:16:27 AM
Eso de que la polí­tica hace extraños compañeros de cama, es una verdad como un templo. Y curiosamente aquí­ queda muy clarito cuando clama conque la derecha intenta tapar la boca a la izquierda y luego menciona los ataques a Vascongadas y Cataluña. Señor Carrillo, ¿desde cuando los separatismo Vascongados o Catalanes están representados por formaciones de izquierdas?

Al final tení­a razón yo el otro dí­a con lo del odio visceral de la izquierda a cualquier cosa que se parezca a una idea de España. Los abuelitos de la cosa lo demuestran con esa desvergí¼enza tan propia de la edad.

siguiendo ese razonamiento, si los nacionalismos vascos o catalanes NO pueden ser de izquierdas porque la izquierda y el nacionalismo se repelen, es normal y totalmente coherente ese "odio visceral" que mencionas a la idea de españa, porque, ohhh, atención, esto igual os shockee pero es necesario que lo sepais, españa es una NACIÓN, no un ente mí­stico o ideológico, no una esencia de vuestro ser, es simple y llanamente una nación

Didius

Cita de: Belial en Febrero 12, 2007, 10:22:20 AM
¿De dónde deduces tú eso? Como mucho, a la idea de la España eterna de las esencias que enarbolan algunos como si se tratase de Tizona. Pero yo no leo que Carrillo odie visceralmente a España ni nada de eso.

Precisamente de ese apoyo incondicional a cualquier figura independentista, aunque ideológicamente esté en las antí­podas de lo que se supone "pensamiento de izquierdas" y perdón por el oxí­moron. Seamos serios, el Carrillo del 36 habrí­a hecho fusilar a la cúpula del PNV actual sin temblarle el pulso. Y sin embargo leyéndole resulta que son una pobre ví­ctima de la derecha.

problemaS

No sé que tiene de malo oponerse a la idea de España que tienen algunos españoles. Si ser español es ponerse bajo la bandera y el himno y desfilar con Rajoy, Acebes, Zaplana y el de la AVT: YO NO QUIERO SER ESPAÑOL.

Me se entiende? Y para eso no hace falta irse muy para atrás en la historia, me bastan los seis últimos años.

Y no es que me gusten otros cromos, y otras banderas, pero YO DE ESA ESPAÑA NO QUIERO SABER NADA. Y repito, no necesito envolverme en otra bandera ni abrazar otra identidad, me basta ser un ciudadano funcional que respeta y exige respeto, pero que no siente ninguna necesidad por proteger una bandera, ni un himno ni una identidad que a mi, ni fu ni fa.
No vemos las cosas como son, sino como somos.

Dan

Cita de: Didius en Febrero 12, 2007, 10:30:17 AM
Seamos serios, el Carrillo del 36 habrí­a hecho fusilar a la cúpula del PNV actual sin temblarle el pulso.

Me gustarí­a ver cómo se hablarí­a en este foro de él, en ese caso, contando las innumerables checas y todo.

EreccionMatutina

Cita de: Némesis en Febrero 12, 2007, 10:31:35 AM
No sé que tiene de malo oponerse a la idea de España que tienen algunos españoles. Si ser español es ponerse bajo la bandera y el himno y desfilar con Rajoy, Acebes, Zaplana y el de la AVT: YO NO QUIERO SER ESPAÑOL.

Tu sel muy bobo
Tu moldel la mano que dalte de comel
A ti gustal el Faly. Segulo
Lespetuosamente, saludos

Didius

No deja de ser curiosa esta mentalidad izquierdista para la que el desfile de banderas españolas, y la emisión del himno nacional es poco menos que el Mal (así­ con mayúsculas). Y sin embargo se ponen cachondos la profusión de banderas vascas y catalanas aderezando actos que parecen salidos de las representaciones sindicales de antaño.

Y lo cojonudo es que luego nos acusan de robar simbologí­a cuando ellos la abandonaron hace tanto tiempo. Antes de la Guerra Civil de hecho.


pescadilla

Cita de: Didius en Febrero 12, 2007, 10:37:29 AM
No deja de ser curiosa esta mentalidad izquierdista para la que el desfile de banderas españolas, y la emisión del himno nacional es poco menos que el Mal (así­ con mayúsculas). Y sin embargo se ponen cachondos la profusión de banderas vascas y catalanas aderezando actos que parecen salidos de las representaciones sindicales de antaño.

Y lo cojonudo es que luego nos acusan de robar simbologí­a cuando ellos la abandonaron hace tanto tiempo. Antes de la Guerra Civil de hecho.

los enemigos de mis enemigos son mis amigos

Didius

Cita de: pescadilla en Febrero 12, 2007, 10:39:16 AM
los enemigos de mis enemigos son mis amigos

Me alegra entonces que me des la razón.

Cita de: Didius en Febrero 12, 2007, 10:16:27 AM
Eso de que la polí­tica hace extraños compañeros de cama, es una verdad como un templo. Y curiosamente aquí­ queda muy clarito cuando clama conque la derecha intenta tapar la boca a la izquierda y luego menciona los ataques a Vascongadas y Cataluña. Señor Carrillo, ¿desde cuando los separatismo Vascongados o Catalanes están representados por formaciones de izquierdas?

Al final tení­a razón yo el otro dí­a con lo del odio visceral de la izquierda a cualquier cosa que se parezca a una idea de España. Los abuelitos de la cosa lo demuestran con esa desvergí¼enza tan propia de la edad.