Corredor sin retorno

Iniciado por Zimm..., Agosto 22, 2006, 09:40:25 AM

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Zimm...

Y no, no me refiero a banabil y su última experiencia sexual en las fiestas de su barrio. Es una pelí­cula cojonuda de Samuel Fuller, de 1963 (Shock Corridor).
EL leif motiv es el tí­pico encierro en un sanatorio mental de una persona sana, al que poco a poco puedes ver cómo se le va el panchito.
El expesionismo de Samuel Fuller le viene ni pintado para el muestrario de locos que aparecen. Para mi es superior al Alguien voló sobre el nido del Cuco, aunque son diferentes.
La pelí­cula ganó en su año la Seminici de Valladolid (hola Laura), por eso aparece ahora en DVD con subtí­tulos en castellano.
Aqui os pongo el enlace, os gustará seguro

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I found it in the street/ At first I did not see/ Lying at my feet/ A trampled rose

Zimm...

I found it in the street/ At first I did not see/ Lying at my feet/ A trampled rose

lukera

Por subirte el hilo, Zimm 
;). ¿Se ha hablado aquí­ de "El experimento"?. Es la de los ciudadanos normales que captan para repartirles roles de carceleros y presos y acaba como el rosario de la aurora.

No es que sea una joya, pero tení­a su puntito.

Bic

El primer hilo que escribí­ en el Paleoareópago se llamaba "El experimento que probó que todos somos escoria", y en él hablé del experimento de marras, un par de años antes de que se rodara la peli.

Sobre el experimento: siempre me ha fascinado cómo los "guardias"
desarrollaron rapidí­simamente comportamientos sádicos e hijoputescos (obligar a limpiar retretes con las manos, aislamiento, privación del sueño, insultos y humillaciones), mientras que los presos sufrí­an estrés post-traumático, desórdenes de pensamiento, crisis de ansiedad... Mi momento preferido: uno de los presos empezó a quejarse activamente del comportamiento de los carceleros. Como represalia, los guardias ofrecieron una elección a los presos: o les quitaban a todos las mantas durante una noche, o mantení­an al quejica encerrado en un mini-lavabo toda la noche. Los presos eligieron conservar las mantas y al desgraciado que se quejaba que le fueran dando por el orto. Toma ya solidaridad entre oprimidos.

Sobre la peli: está bien, sobretodo hacia el principio, pero el "crescendo"
final que le añaden a la historia real para hacerla más emocionante queda en mi opinión bastante "pegote"
y poco creí­ble.

P &
L
Los libros son finitos, los encuentros sexuales son finitos, pero el deseo de leer y de follar es infinito, sobrepasa nuestra propia muerte, nuestros miedos, nuestras esperanzas de paz.