Historias de la Lega / Kalziako Historiak

Iniciado por Bambi, Marzo 06, 2006, 11:53:35 AM

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Pedigí¼eño

Cita de: Gatinho en Enero 17, 2007, 09:18:39 PM
No iba por el sorteo en sí­, sino por el hecho de que te pueda ganar el torneo un Liverpool del 2005 o un Porto del 2004 habiendo otros equipos mejores. Hombre, el Barí§a deberí­a pasar si no ocurre nada raro, pero a dos partidos, ya se sabe.

Léete lo que puedas del hilo Temporada, te echarás unas risas.

Me da pavor. Casi mejor hacemos tabla rasa y damos caña desde ahora.

Bambi

CitarSabrás también qué gran entrenador vascoespañol los eliminó el año anterior en UEFA.


¿No será ese que ha dicho que si Luí­s Fernández fichaba por el Bilbao él se quitaba de socio, y que ha ido a la ciudad ideal (sevilla) porque está todo el dí­a de fiesta, trabaja poco y le gusta el paboneo? A lo que el de Tarifa ha contestado que está orgulloso de su labor (la de Clemente) en el Español ¡qué brillante! dejándolo en puestos de descenso para cogerlo él y salvarlo y que se fue por la puerta de atrás del Athletic, equipo que el andaluz dejó subcampeón.

Ha molado. Yo les poní­a a uno en el Sevilla y al otro en el Betis.

Gatinho

EL MEJOR FUTBOLISTA DE ITALIA

Los futbolistas de élite, como los polí­ticos, suelen mantener una relación ansiosa con el público y la historia. No lo saben al principio, cuando debutan como profesionales y aún no tienen lo que, a poco que vayan bien las cosas, les dará el tiempo: un montón de millones en el banco, un deportivo en el garaje y una modelo en casa. El futbolista joven supera poco a poco los miedos, juega y sueña momentos de gloria. El ansia llega más tarde, con la veteraní­a. Cuanto más celebrado es, mayor el ansia. Los aplausos se dan por descontados y nunca son suficientes. Hacen falta más focos, más ví­tores, más premios. El futbolista treintañero empieza a vislumbrar la retirada, una especie de muerte civil que le apartará de escena y le arrebatará parte de su identidad. En ese momento empiezan las tensiones con la historia, traducibles en una pregunta: "¿Qué se recordará de mí­ cuando haya muerto?".

Algunos, pocos, saben que la retirada no traerá el olvido. Francesco Totti será el rey de Roma mientras viva. Paolo Maldini será un modelo para futuras generaciones. Un caso extremo es el de Alessandro del Piero, que ya es el monumento de sí­ mismo. Hace cuatro años, cuando renovó con el Juventus hasta 2008, hizo una promesa en una página de publicidad de La Gazzetta dello Sport: "Un caballero no abandona nunca a una señora". Su compromiso con la Vecchia Signora de Turí­n estuvo a punto de romperse con el descenso administrativo a la Serie B y la inevitable tentación de cambiar de equipo, pero, para su suerte, no hubo ninguna oferta golosa. Del Piero siguió en la Juve y en la temporada del castigo ha alcanzado dos hitos excepcionales: 500 partidos y 200 goles con la Signora.

Se trata de un caso curioso. Cuando debutó, le quitó el puesto a Roberto Baggio, un futbolista de superior talento. La madurez le aportó una misteriosa musculatura -hay que decir misteriosa porque la justicia italiana no ha podido probar las sospechas de dopaje- y le privó de la magia juvenil. Hoy es un futbolista regular que cumple a la perfección con su trabajo. El sábado marcó un gol, fabricó otros dos y aupó al Juventus a la cabeza de la clasificación, con la Serie A al alcance de la mano.

Más allá, Del Piero seguirá explotando las cualidades que le han ayudado a sobresalir por encima de compañeros más hábiles: la inteligencia, la simpatí­a, las dotes de actor.

Alessandro del Piero se sabe destinado a dirigir la Juve, quizá a presidirla. A diferencia de Baggio, ocupado en su finca agrí­cola y en sus partidas de caza, tan desaparecido que la prensa especula sobre si ha engordado o no, Del Piero seguirá en escena.

Existe una categorí­a aún más especial, la de quienes no se preocupan ni por el público ni por la historia. Son tipos que aman el balón, no la gloria, y no llegan a superar el miedo del primer dí­a. Les cuesta funcionar bajo presión y difí­cilmente alcanzan a jugar en equipos de renombre. Cristiano Doni es uno de ellos. Maduró tarde, creció en el Atalanta de Bérgamo, pasó una temporada deprimente en el Sampdoria, se comportó discretamente en el Mallorca y el pasado verano, con 33 años, regresó al Atalanta. Nadie esperaba de él más que lo justo: un poco de experiencia y un poco de orden en el centro del campo.

Doni ha sido elegido por La Gazzeta dello Sport, con toda justicia, como el mejor jugador del calcio en la primera vuelta liguera. Fue suplente en la Copa del Mundo de 2002, nunca ha disputado un encuentro de la Champions ni ha lucido un scudetto sobre el pecho. En teorí­a, deberí­a estar condenado al olvido. "Cada partido era un examen. Sentí­a una opresión en el estómago. Jugaba estresado", dijo ayer a La Gazzetta hablando de su modesta carrera.

Ya al borde de la muerte futbolí­stica, liberado de presiones, Doni se ha convertido en una maravilla. Por fin, hace lo que le gusta: jugar con un balón.


Enric González es autor de Historias del Calcio
Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.

Pedigí¼eño

Francesco Totti será el rey de Roma... joder, y Giannini? Qué pasa con el Prí­ncipe? Ya lo han olvidado?

el de la 13

Totti es un senyor. El tio que estí  mandando al suelo de un senyorial empujon es, creo, su preparador personal, un amigo en cualquier caso.



Sus voy a hacer una pubricidad mala.

Gatinho

Espectacular la dosis de hoy (Dios quiera que Karpin siga los pasos de Berlusconi pero con el Celta):



Historias del Calcio. ZEITGEIST

Un señor llamado Giovanni Bernardone dei Moriconi, apodado Francisco (porque su madre era francesa) de Así­s (porque nació allí­), fundó a principios del siglo XIII una orden de frailes basada en la pobreza y la fraternidad. Francisco de Así­s predicó el amor por la naturaleza y la vida y revolucionó la percepción del cristianismo entre los creyentes de a pie. Aunque nadie lo notara entonces, sus palabras generaron un zeitgeist, un espí­ritu del tiempo. Décadas después, Giotto, el pintor que decoró la basí­lica franciscana de Así­s, tradujo en arte ese zeitgeist: se apartó del hieratismo bizantino e insufló alma y movimiento en sus figuras. Las claves del Renacimiento y de la Edad Moderna estaban todas ahí­. El zeitgeist de Así­s floreció durante siglos.

El zeitgeist de una época es fácil de percibir, pero difí­cilmente se deja comprender. Flota en el aire. En algunas ocasiones, el zeitgeist imperante cambia de forma tan brusca que a nadie se le escapa el fenómeno. Eso ocurrió, por ejemplo, cuando el espí­ritu turbulento de los 60 y los 70 se transformó en el espí­ritu mercantil y orondo de los 80. Una de las ciudades que con más presteza se adaptaron entonces al nuevo signo de los tiempos fue Milán. Era la Milano da bere del socialista Bettino Craxi, vestida de Armani, corrupta hasta la médula y forrada de liras en negro. En España no se usaba aún el término pelotazo ni se sospechaba que los ladrillos llegarí­an a ser de oro, pero en Milán ya galopaba el futuro, plasmado en la simbiosis entre el poder polí­tico de Craxi y el emergente poder económico de un constructor llamado Silvio Berlusconi.
Con el dinero inmobiliario, Berlusconi fundó un imperio televisivo y compró una sociedad futbolí­stica en la que aplicó todo su instinto. El Milan fue el primer equipo galáctico y probablemente el mejor. Hoteles de cinco estrellas, merchandising, tecnologí­a aplicada (el Milan Lab), espectáculo permanente y presupuestos de vértigo. La fórmula, como se sabe, funcionó.

No hay más que echar un vistazo al Milan de hoy para adivinar que el zeitgeist de los 80 se ha evaporado por las rendijas de la historia. Hay algo de vieja fotografí­a en las maniobras de Seedorf, el oportunismo de Inzaghi y el voluntarismo portentoso de Maldini. La imagen de Adriano Galliani, el factotum milanista, en la grada de San Siro con Ronaldo, el otro dí­a, es decididamente sepia. Ronaldo tiene sólo 30 años, pero su corpachón, demasiado grande para sus rodillas y para sus reflejos, constituye casi una metáfora.

El Milan sudó ayer para ganar, 1-0, gol de Inzaghi, al modestí­simo Parma. El joven italoamericano Giuseppe Rossi, un delantero prometedor por el que ya se ofrecen fortunas, no hizo nada, pero aún así­ al Parma le bastó defender para desnudar las verguenzas de un Milan cada vez más parecido a un diplodocus: pesado, lento, con un culo muy grande y una cabeza muy pequeña.

No sirve apelar a los puntos de sanción, ni a la fuga de Shevchenko, ni a la potencialidad de Kaká y quizá de Gourcouff. El glamour milanista se ha desvanecido. Es de otra época.

Lo mejor que se vio ayer tarde en el calcio (a falta del vespertino Sampdoria-Inter) ocurrió cerca de Milán, en Bérgamo. El Atalanta ganaba al Catania, 1-0, a falta de cinco minutos. La cosa parecí­a tan cantada que el entrenador retiró a Doni, el alma del Atalanta bergamasco. El Catania probó un último recurso y sacó al campo a Takayuki Morimoto, un japonés de 18 años que nunca habí­a jugado en la Serie A. Morimoto tardó tres minutos en marcar un gol que habrí­a firmado el Ronaldo de antes. Es difí­cil definir el zeitgeist contemporáneo, impregnado de miedo y gnosticismo, pero seguramente tiene más que ver con Morimoto que con Ronaldo.


Enric González es autor de Historias del Calcio
Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.

Gatinho

Más literatura futbolí­stica de alta calidad:


(19/1/2006)
'El Loco' Gatti
EN EL REAL ESTíN TODOS LOCOS...

Hace seis años que escribo del Real Madrid, club del que me hice fanático por su fútbol vistoso y de calidad. Hoy he visto un equipo que me ha hecho acordarme de cualquier conjunto del fútbol argentino. Sus jugadores querí­an ganar de guapos, sin apostar al fútbol, un equipo sin idea de juego aunque los futbolistas no tengan la culpa. El mensaje del técnico, desde el primer partido que con él jugó el Madrid hasta hoy, es un mensaje de futbolistas que salen con el revólver para ganar de cualquier manera.

Pero lo que más me dolió es que hasta el público se está contagiando. Querí­an ganar el partido desde la grada. Hostigando, tirándole cosas al linier. Este no es el Madrid que yo conocí­a. Y ahora es el momento de sacar conclusiones. El dueño del club y de las decisiones es el presidente, y está confundido. El mánager general y el técnico también tienen su culpa. Es un trí­o que tiene que ir al psicólogo. Si no, el Madrid está llegando a su fin. Esto es alarmante y preocupante. Y no puedo entender que en todo esto aparezca Nieto y que a Ronaldo le quieran sacar a patadas. Y este Madrid sin Ronie no es nada. Están todos un poco locos.
Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.

Bambi

Cuando se refiere a juego "vistoso" del Real Madrid, como no sea el de la Quinta del Buitre, no creo que hubiera nacido cuando el Madrid ye-ye.

El Miserable

No sólo sí­ habí­a nacido, sino que era el segundo portero de Argentina durante el Mundial 66.

Besos,

E.M.

El Miserable

Cita de: El Miserable en Enero 30, 2007, 05:27:52 PM
No sólo sí­ habí­a nacido, sino que era el segundo portero de Argentina durante el Mundial 66.

Besos,

E.M.

A todo esto, el dato me lo acabo de inventar, así­ que si en efecto, así­ era, soy uno de los hombre con más suerte del universo conocido.

E.M.

Gatinho

De la Wikipedia:

Ha sido internacional con la Selección nacional de fútbol de Argentina en 18 ocasiones,[1] integrando el plantel que participó en Inglaterra 1966. Fue titular durante gran parte del proceso que desembocó en Argentina 1978 pero renunció a integrar el plantel mundialista porque no queria ser suplente de Ubaldo Matildo Fillol.


Yo tengo que reconocer que se ha quedado conmigo con la respuesta.
Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.

El Miserable

Lo cierto es que lo sabí­a, porque lo dijo en un programa de la Sexta durante el Mundial de Alemania.

Pero me apetecí­a vacilar un poco...

E.M.

al bundy


http://www.diariosdefutbol.com/2007/01/29/enric-gonzalez-un-diario-deportivo-serio-bien-escrito-y-sin-furores-pasionales-seria-viable-en-espana/

Enric González: “Un diario deportivo serio, bien escrito y sin furores pasionales serí­a viable en España"

Cuando los miembros de Diarios de Fútbol nos conocimos, y comenzamos nuestra aventura como bloggers escribiendo sobre fútbol, una cosa tení­amos clara. Querí­amos elaborar una información deportiva muy diferente a la que hoy dan los periódicos deportivos. Hablamos largo y tendido sobre cómo querí­amos que fuera nuestra página, y en esas conversaciones, recurrentemente aparecí­a, entre otros, un nombre: Enric González. Para nosotros, el autor de “Historias del Calcio” â€"columna que publica todos los lunes en El Paí­s- era, y es, nuestro máximo referente.

Hoy, nuestra página se viste de gala para recibirle. Nos ha concedido una entrevista en la que habla sobre fútbol, sobre su trabajo como corresponsal y sobre, como él para nosotros, quiénes son sus referentes a la hora de desarrollar su trabajo.

Para quienes no lo conozcan â€"si es que entre nuestros lectores hay alguno que no sepa de él-, diremos que Enric González es corresponsal en Roma del diario El Paí­s. Anteriormente, desarrolló su trabajo como corresponsal en ciudades como Londres, Nueva York (ciudades sobre las que tiene escritos sendos libros), Washington y Parí­s. Asimismo, es autor de la columna “Historias del Calcio”, que todos los lunes publica el mismo periódico, la cual es una magní­fica muestra de cómo se puede escribir sobre fútbol, desde una perspectiva amplia culturalmente, y con un marcado estilo literario. Un auténtico oasis en el actual modo de tratar al llamado deporte rey.

Como corresponsal, ¿ha cambiado mucho tu trabajo en los 13 últimos años con la explosión de Internet y el acceso más sencillo a la información? En este sentido, la figura del corresponsal, de la persona que acude allí­ donde suceden los actos, ¿sigue estando vigente en este mundo globalizado? ¿Sigue teniendo autoridad el “haber estado allí­â€?

Empecé el asunto de las corresponsalí­as en Londres, en 1991, sin móvil ni Internet. Y mi trabajo, desde entonces, ha cambiado en tres cosas: es más fácil transmitir, es más, mucho más fácil acceder a la documentación elemental (antes podí­as volverte mico para averiguar cosas como el nombre completo de alguien) y es mucho más difí­cil manejar la corresponsalí­a. Explico esto último: la profusión de informaciones por Internet tiende a hacer pensar a los jefes en Madrid que lo saben todo sobre todo. Antes, la gran mayorí­a de los temas los proponí­a el corresponsal. Ahora, la mayorí­a son encargos de la redacción. Craso error. “Estar ahí­â€ es tan importante como antes, o más, porque Internet supone abundancia, pero también confusión. Y es además accesible a todos. Los diarios, por señalar un tipo concreto de medio, llevan años recogiendo cosas que todo el mundo ha visto ya por televisión o ha escuchado por radio. Ahora copian sus propios diarios digitales del dí­a antes. Somos así­.

En este sentido del “haber estado ahí­â€, vemos que tu trabajo no se limita a la corresponsalí­a. Además, has publicado dos libros sobre ciudades en las que desarrollaste tu trabajo (Londres y Nueva York). ¿Cuándo y por qué te planteas estos libros? ¿Surgen poco a poco o responden a proyectos bien definidos desde un principio?

Nunca me planteé nada ni hubo proyecto de ningún tipo. Entre Parí­s y Nueva York pasé casi dos años en Barcelona y una editora, Anik Lapointe, me convenció para que escribiera algo sobre Londres. Decidí­ que nunca más, porque escribir es cansado. Pero cuando dejé Estados Unidos y me trasladé a Roma, Anik volvió a convencerme para que hiciera algo sobre Nueva York. No me apetecí­a especialmente, hasta que murió Ricardo Ortega en Haití­. Ricardo era amigo mí­o y pensé que si contaba algo sobre él, estarí­a menos muerto. El librito de Nueva York es una excusa para hablar de Ricardo, de Julio Anguita y de Juan Carlos Gumucio, tres amigos desaparecidos.

¿Cuáles son tus columnistas favoritos de la actualidad? ¿Has tenido algún maestro en la profesión periodí­stica o te consideras autodidacta en ese sentido?

Maestros he tenido muchos. Yo creo que casi todos mis colegas me han enseñado algo. Otra cosa es que yo sepa manejar esas enseñanzas. Si tuviera que citar un modelo, desde siempre, dirí­a que José Martí­ Gómez, al que conocí­ cuando aún iba al colegio. Me gustan las columnas veraniegas de Javier Sampedro, las de Javier Marí­as, muchas columnas deportivas británicas, bastantes de Carlos Boyero, las que hace Santi Segurola, cualquier cosa que escriba Sol Gallego Dí­az… El mejor columnista en castellano, para mí­, fue Julio Camba.

Conocemos la génesis casi casual de tus “Historias del Calcio”, ¿estás contento con cómo se ha desarrollado la serie en estos años?

No sé si contento. Estoy sorprendido de que haya durado ya cuatro años.

¿Cómo preparas esos artí­culos? ¿Cuánto hay de documentación, cuánto de conversación con buenos aficionados italianos y cuánto de memoria?

Lo único que decidí­, después de que tras la primera pieza me pidieran una segunda al domingo siguiente, fue funcionar de forma absolutamente ‘amateur’. Nunca preparo nada. Todas las “historias” se hacen el domingo por la tarde, entre las 5 y las 7, esté donde esté. Bastantes están escritas a mano, sin ningún apoyo documental. Pongo lo que me apetece poner el domingo a las 5, cuando terminan la mayorí­a de los partidos italianos. Abundan las referencias a libros sobre fútbol (en Italia se publican más que en España) y pesan mucho las charlas con aficionados locales, pero al final triunfa lo subjetivo. Es decir, hablo de mis maní­as.

¿Qué sensaciones recibes de tus lectores en torno a las “Historias”?

Vivo en Italia, lo cual me aisla bastante. Pero llegan reacciones muy buenas. Incluso desde Italia.

En alguna ocasión las has definido como “crónicas oblicuas”, y has dicho que entiendes, pero no compartes, las reservas en la aplicación de este estilo de crónicas a otro tipo de información que no sea la deportiva. Sin embargo, las historias del Calcio recuerdan a las crónicas de Ryszard Kapuscinski, textos que viajan de lo anecdótico a lo trascendente, de lo diario a la historia, de la fábula a la reflexión, etcétera. Serí­a un método muy interesante aplicarlo a otras cuestiones, como la polí­tica o la cultura… ¿Te atreverí­as con un “historias” con otro tema?

Absolutamente. Yo me atreverí­a. Es más, a veces utilizo las páginas de deportes para contar cosas de Italia que no caben en otras secciones. Pero dudo que los periódicos apostaran por esa lí­nea. Basta ver lo bien escritas y entretenidas que son, en general, las páginas de deportes, y lo áridas que son otras páginas. El género de la crónica está muy vigilado desde hace tiempo. Me parece un error. Yo creo que Santi Segurola podrí­a (es un mero ejemplo) hacer estupendas crónicas parlamentarias con el mismo estilo que las de fútbol. Maruja Torres demostró este verano que se podí­an escribir desde Beirut, en plena tragedia, crónicas interesantí­simas y con su punto de humor.

Te declaras seguidor del Espanyol y el Inter. Seguro que tienes una explicación, y que no le falta romanticismo.

Soy del Espanyol porque mi padre lo es, y porque empezó a llevarme a Sarriá desde muy pequeño. No hay más explicación. Lo del Inter es más raro. A los cinco años vi por televisión la final Inter-Real Madrid y me fascinaron tanto la camiseta del Inter, que en blanco y negro se veí­a muy oscura, como el nombre: Internazionale. Aquel Inter, además, jugaba muy bien. Y me quedó la cosa del Inter como un vicio estrictamente solitario. Sólo pude empezar a compartirlo cuando me establecí­ en Roma.

¿Cuáles son tus futbolistas favoritos de todos los tiempos? ¿Y los que más te hacen disfrutar en la actualidad?

Dejo de lado los Pelé, Maradona, Cruyff, Beckenbauer y demás indiscutibles, de pequeño me encantaba Marcial. El Schuster de 1980 me pareció algo supremo. Van Basten es lo más elegante que he visto. Zidane, claro. Lato y Gadocha, el dúo de extremos polacos. Oblak, un centrocampista yugoslavo. Sócrates. Ahora, Ibrahimovic, Totti, Ronaldinho, Kaká, Henry. Y Tamudo, claro.

En tus “Historias” ya previste la posibilidad de una Italia campeona del Mundo. Uno de los argumentos era curioso, que el fútbol italiano atravesaba por una tormenta, como en el Mundial 82. ¿No es esto paradójico?

No. Los grupos más sólidos suelen formarse frente a la presión externa. Ocurrió con Italia en 1982, y volvió a ocurrir en 2006. Un grupo de futbolistas competentes al que se ningunea suele tener mucho peligro. Y luego estaba Buffon.

Aquí­ seguimos con gran interés tus artí­culos sobre el Moggi-gate. ¿Cuál crees que hubiera sido la sanción adecuada? ¿No crees que con las rebajas de sanciones ha quedado una sensación de cierta impunidad?

Bastante impunidad. La Juve, al menos, podrá decir que ha pagado con una temporada en la Serie B. Los demás, al parecer, eran casi inocentes. Los males se reproducirán en poco tiempo, porque nada ha cambiado. Eso lo dice hasta Guido Rossi, el gestor que se hizo cargo de la Federación cuando estalló la crisis.

En una columna reciente escribiste que la afición al fútbol italiano se adquiere, como el gusto por el tabaco o la cerveza negra, ¿cuándo y cómo comenzaste a tener dicha afición? ¿Con qué otras ligas disfrutas?

Ya he contado lo del Inter. Otro elemento histórico han sido las transmisiones por televisión: los comentaristas italianos son los mejores del mundo, sin ninguna duda. Empecé a aficionarme a las transmisiones italianas cuando estaba en Parí­s. Incluso el idioma ayuda. Entre un “pase” y un “suggerimento”, no hay color. Sigo también la Premier y la Liga española.

Dicen que Beckham ha estado cerca del Inter, pero finalmente se marcha a Los íngeles, ¿es una noticia para la sección de deportes, para la de espectáculos o para la crónica social?

Ahora es crónica social, aunque no soy de los que creen que Beckam ha sido un “bluff”. Sólo tiene el pie derecho, pero es un gran pie.

El Inter, haciendo honor a su nombre y a su historia, ha ido recopilando un sinfí­n de jugadores extranjeros en las dos últimas décadas, dando al club una cierta imagen de despilfarro y de sinsentido en cuestión de planificación de plantilla. Algunos han sido buenos, otros regulares, y otros, directamente, para el olvido. ¿De cuál de todos ellos guardas un mejor recuerdo? ¿Qué futbolista extranjero, de todos los que han vestido la nerazzurra estos últimos 20 años, crees que ha aportado más al equipo?

Quien más ha aportado ha sido Javier Zanetti, lo único establemente serio en largas temporadas de disparate. Lo más vistoso, el Ronaldo de la primera temporada y el Ibrahimovic de esta. Pero todo es relativo en un equipo cuyo alma es Materazzi.

Siguiendo con el Inter… Desde principio de temporada hay alguno de nosotros que sostiene que el Inter es uno de los grandes favoritos para llegar muy lejos en la Liga de Campeones. ¿Lo ves llegando a la final? ¿Qué impresiones te da la eliminatoria frente al Valencia?

Creo que el Inter eliminará al Valencia. Y pienso que puede llegar a la final. Pero la Liga de Campeones, como las presidenciales francesas, las ganan los veteranos. Y el Inter aspira por primera vez en mucho tiempo. Me parece que el Inter debe alcanzar al menos semifinales, y tendrá la obligación de ganar el año próximo.

Una cuestión que nos atañe a nosotros: ¿Cómo ves el auge en los últimos años de la información en Internet y más concretamente el mundo de los blogs? ¿Lees blogs deportivos habitualmente? Y pequeña curiosidad personal, ¿conocí­as Diarios de Fútbol?

Como no estoy en España, utilizo los blogs de fútbol como sustitutivo de la charla. Los frecuento. Y sí­ conocí­a Diarios de Fútbol.

Para terminar, ¿crees que los diarios de información deportiva en otros paí­ses poseen más calidad y/o imparcialidad que los españoles? ¿Ves factible desde el punto de vista empresarial un diario deportivo riguroso e imparcial, al estilo de la sección de Deportes de El Paí­s?

En España no existe una “Gazzetta” o un “Equipe”, lo que hay son boletines de forofos. Estoy convencido de que un diario deportivo serio, bien escrito y sin furores pasionales serí­a viable.
i s'ha demostrat, s'ha demostrat, que mai ningú no ens podrà  tòrcer

al bundy

El partido de fútbol más extraño de la historia

Tení­a que ser en el Caribe… En un partido de la Shell Caribbean Cup retransmitido por televisión se enfrentaban las selecciones de Barbados y Grenada y, en la situación más estrambótica que se recuerda en el mundo del fútbol, ambos equipos acabaron cambiándose los papeles. Es decir, los jugadores de Barbados defendiendo la porterí­a de Grenada de los propios jugadores grenadinos, que intentaban marcar en propia puerta.

La explicación a esta absurda situación la encontramos en una extraña regla del torneo y en los rigores del ‘goal average’: en caso de llegar a los penalties, al vencedor de la tanda se le da una victoria por 2 a 0, y Barbados necesitaba ganar por una diferencia de dos goles para clasificarse y pasar a la siguiente ronda.

A cinco minutos del final el resultado era favorable a Barbados, pero tan sólo por 2 a 1, con lo que estarí­an eliminados del torneo. Cuando sus jugadores se dieron cuenta de que no conseguirí­an marcar otro gol, se marcaron uno en propia puerta de manera deliberada para empatar el partido y forzar la tanda de penalties.

Cuando los de Grenada advirtieron su estrategia, intentaron también marcarse un gol, pero los de Barbados se pusieron a defender al mismo tiempo no sólo su propia porteria, sino también la rival para evitar el autogol.

Así­, durante cinco apasionantes últimos minutos los alucinados espectadores vieron como Barbados conseguí­a evitar a la vez el gol en su porterí­a y el autogol en la de Grenada, con lo que se llegó a la tanda de penalties.

Y en ella… ¡Barbados se salió con la suya! Ganó la tanda, consiguió el 2-0 y se clasificó… ¿Alguien da más?
http://www.dedeporte.es/index.php/2006/12/17/el-partido-de-futbol-mas-extrano-de-la-historia/

                                 http://www.youtube.com/v/ThpYsN-4p7w
i s'ha demostrat, s'ha demostrat, que mai ningú no ens podrà  tòrcer

Gatinho

Cita de: al bundy en Enero 31, 2007, 09:59:29 AM
al vencedor de la tanda se le da una victoria por 2 a 0

Muerte.
Así­ pasa lo que pasa. Supongo que el hecho de estar tan cerca de Estados Unidos hace que no les quepa en la cabeza el concepto empate.
Suena a una historia que me contaron de hace muchos años del Madrid de baloncesto, supongo que de la época de Brabender, Luyk o más antigua, no recuerdo. El caso es que habí­an perdido la ida de una eliminatoria europea por, pongamos, cinco puntos; faltaban poquí­simos segundos y ganaba el Madrid por dos, con posesión a favor, y sin la existencia de lanzamientos triples en aquel entonces. Solución: nos metemos una canasta en propio aro, "forzamos" la prórroga, y ganamos luego en el suplemento de cinco minutos por más de cinco puntos. Y así­ fue. Lógicamente, a partir de ese precedente está permitido empatar en el baloncesto partidos de eliminatorias a ida y vuelta.


Cita de: Rí tzia en Enero 31, 2007, 03:50:37 PM
la mayor parte de los atletas de elite han nacido en el primer semestre del año

Maradona, Van Basten y yo somos los mejores futbolistas del mundo, Europa y mi pueblo de los últimos treinta años. Los tres somos escorpiones.
Fin del debate.
Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.