Personajes curiosos, trascendentales y olvidados de la Historia

Iniciado por Agarkala, Noviembre 06, 2008, 12:22:50 PM

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lorenz

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nora hildebrandt

   â™¥

lorenz


yonnon

Me aceptais un psicokiller?



Alguien capaz de escribir algo asi... ::) ::)

A Letter from Hell - The Confession of Killing Gracie Budd by Albert Fish, sent to her mother

"My dear Mrs. Budd,

In 1894 a friend of mine shipped as a deck hand on the Steamer Tacoma, Capt. John Davis. They sailed from San Francisco for Hong Kong China. On arriving there he and two others went ashore and got drunk. When they returned the boat was gone.

At that time there was famine in China. Meat of any kind was from $1 to $3 a pound. So great was the suffering among the very poor that all children under 12 were sold for food in order to keep others from starving. A boy or girl under 14 was not safe in the street. You could go in any shop and ask for steak â€" chops â€" or stew meat. Part of the naked body of a boy or girl would be brought out and just what you wanted cut from it. A boy or girls behind which is the sweetest part of the body and sold as veal cutlet brought the highest price.

John staid there so long he acquired a taste for human flesh. On his return to N.Y. he stole two boys one seven, one 11. Took them to his home stripped them naked tied them in a closet.  Then burned everything they had on. Several times every day and night he spanked them â€" tortured them â€" to make their meat good and tender.

First he killed the 11 year old boy, because he had the fattest ass and of course the most meat on it. Every part of his body was Cooked and eaten except the head â€" bones and guts. He was Roasted in the oven (all of his ass), boiled, broiled, fried and stewed. The little boy was next, went the same way. At that time, I was living at 409 E 100 st., near â€" right side. He told me so often how good Human flesh was I made up my mind to taste it.

On Sunday June the 3rd 1928 I called on you at 406 W 15 St. Brought you pot cheese â€" strawberries. We had lunch. Grace sat in my lap and kissed me. I made up my mind to eat her.

On the pretense of taking her to a party. You said Yes she could go. I took her to an empty house in Westchester I had already picked out. When we got there, I told her to remain outside. She picked wildflowers. I went upstairs and stripped all my clothes off. I knew if I did not I would get her blood on them.

When all was ready I went to the window and called her. Then I hid in a closet until she was in the room. When she saw me all naked she began to cry and tried to run down the stairs. I grabbed her and she said she would tell her mamma.

First I stripped her naked. How she did kick â€" bite and scratch. I choked her to death, then cut her in small pieces so I could take my meat to my rooms. Cook and eat it. How sweet and tender her little ass was roasted in the oven. It took me nine days to eat her entire body. I did not f*** her though I could of had I wished. She died a virgin."




http://en.wikipedia.org/wiki/Albert_Fish


yonnon

Cita de: Doppelgí¤nger en Julio 23, 2013, 12:04:57 PM



No se si es un bulo o cierto, pero cuando lo iban a ejecutar, al primer intento el colega cortocircuito la silla electrica (caso de que sea posible) debido a las agujas metalicas que llevaba clavadas en el escroto y por alli:




Lacenaire

Un monstruo y una hez al que le mola el dolor. ¿A un tí­o así­ qué coño le haces? ¿Una pajilla?

Son of a beach

los niggas de guetto son bastante parecidos a los gitanos, que ninguno es comunista porque en la bandera salen herramientas.

Carson_

Cita de: Leopold Von Scrott en Julio 24, 2013, 11:48:11 PM
Pues depende.

A este le consiguió un master la progredumbre

http://www.asesinos-en-serie.com/jack-unterweger-el-estrangulador-de-viena/

¿Es posible que no exista ningún documental sobre Jack Unterweger? La historia es apasionante. Creo que me estoy yonnonizando.

yonnon

Cita de: Carson_ en Julio 26, 2013, 10:07:49 PM
Cita de: Leopold Von Scrott en Julio 24, 2013, 11:48:11 PM
Pues depende.

A este le consiguió un master la progredumbre

http://www.asesinos-en-serie.com/jack-unterweger-el-estrangulador-de-viena/

¿Es posible que no exista ningún documental sobre Jack Unterweger? La historia es apasionante. Creo que me estoy yonnonizando.

no es necesariamente malo :-)


otro tipo curioso

http://es.wikipedia.org/wiki/Wilhelm_Reich

Agarkala

Eh, Reich de olvidado nada, cuidado. Que las terapias bioenergéticas y en general todas las que trabajan con el cuerpo le deben mucho a sus teorí­as sobre las resistencias corporales.



ENNAS

Carolyn Boyd publica un ensayo tí­tulado "Los manuales escolares" en el decimosegundo volúmen de la colección de Historia de España dirigida por Josep Fontana y Ramón Villares.

En el nos cuenta como se afrontó la enseñanza de la historia en los siglos XIX y XX. Muy conservadores y elitistas se propusieron una educación estamental en tres sectores, la primaria que debí­a ser universal, la secundaria para los adinerados y la terciaria o universitaria para los talentosos de entre los privilegiados. Todos debí­an estudiar historia de España, pero...

Resulta que los Ayuntamientos, de quienes dependí­a la construcción de escuelas, no tení­an dinero para permití­rselo o les parecí­a más importante que los niños se pusieran a trabajar cuanto antes. Sucede que según el concordato la Iglesia era la celadora de toda la educación primaria. Y hete acá que la Iglesia se negó en redondo a impartir historia de España, en su lugar enseñaba historia sagrada.

Y si en secundaria la obligaban a incluí­r tres cursos de historia de España, los diversificaba en un curso de historia, otro de geografí­a y un tercero de historia "universal" que en el fondo no era sino su querida historia sagrada. Y en cuanto a adoptar un manual único para la enseñanza, la Iglesia a través de los conservadores siempre bramó contra ese ataque a la "libertad de las familias" y a los liberales les daba vergí¼encita desdecirse de su laissez-faire, así­ que los manuales de historia hicieron bueno el dicho "cada maestrillo tiene su librillo" con el que completar sus magros ingresos de docentes.

Así­ pasó el siglo de los nacionalismos, sin una asignatura de historia digna de tal nombre. Cuando a principios del XX los intelectuales clamaban por el poco espí­ritu nacional, se cuidaron muy mucho de no mencionar a la Iglesia Católica, responsable última de la falta de patriotismo de los españoles. Parte por el espí­ritu de la época, con los rampantes nacionalismos periféricos y los pujantes socialismos, parte también porque todas las editoriales de textos escolares estaban en manos de la Iglesia, se procedió -¡a buenas horas!- desde el mundo conservador a dar prioridad a la nacionalización de los españoles.

"Para garantizar la ortodoxia doctrinal y polí­tica, las órdenes empezaron a publicar sus propios libros de texto para sus escuelas. Los Hermanos Maristas abrieron camino en 1889 con F.T.D., más tarde conocido como Luis Vives y posteriormente como Edelvives. Los Hermanos de las Escuelas Cristianas de La Salle los siguieron en 1898 con el sello editorial Bruño, cuya producción anual alcanzó los tres millones de volúmenes en 1928. Estas pioneras allanaron el camino para otras editoriales católicas: Librerí­a Salesiana, E.P. (Escuelas Pí­as), la editorial jesuí­ta Razón y Fe (después llamada Miñón) y S.M. (marianistas)."

Ahora sí­, la Iglesia Católica estaba dispuesta a enseñar Historia de España como mal menor frente a (y contra) separatistas y rojos. Pero sin renunciar a los diversos libros de texto que habí­a que renovar constantemente, que el negocio editorial es su otra gran fuente de ingresos. Ni siquiera el franquismo de la posguerra y su pretensión de un manual de historia único para todos los niños españoles, consiguió doblegar a la Santa Madre Iglesia.

Pero yo querí­a hablaros de Rafael Altamira, personaje que he descubierto a través de este ensayo de Boyd. Un jurista miembro fundador del Tribunal Internacional de La Haya y propuesto dos veces al Nobel de la Paz, cuya biografí­a podéis leer en la web dedicada a su figura:

http://www.rafaelaltamira.es/biografia2.htm

"En 1891, Altamira publicó La enseñanza de la historia, un manifiesto de sus ideas sobre el conocimiento de la historia y la pedagogí­a que se transformarí­a en un modelo para los reformistas españoles de los años siguientes. Proponí­a una transformación de la historiografí­a española, que estaba «llena hoy de fábulas, de calumnias y de patriotismos falsos» y abogaba por una historia nueva «objetiva» y «cientí­fica», que dejara de lado las biografí­as de los grandes hombres para estudiar las de los colectivos sociales. Consideraba que la tarea del historiador era comprender y explicar los «pueblos como unidades sociales, orgánicamente, en todos los aspectos de su actividad y en todas las funciones de su energí­a», pues asumí­a que la psicologí­a esencial de una nación era el resultado de la interacción de sus caracterí­sticas constantes y las siempre cambiantes circunstancias históricas. Para que la historia resultara operativa en el plano polí­tico, Altamira defendí­a la renovación de la pedagogí­a mediante el empleo de los métodos que concedí­an al alumno un papel activo, según preconizaban sus colegas de la Institución Libre de Enseñanza. Siguiendo a algunos historiadores franceses como Lavisse, Monod y Segnebos, afirmó que el valor cí­vico de la historia no estaba en las «lecciones» que daba sino en los hábitos mentales crí­ticos que podí­a inculcar. Al aprender a analizar las diferencias entre las sociedades del pasado y del presente, los estudiantes estarí­an mejor preparados para ver a las instituciones de su tiempo como resultado de la evolución histórica y las actividades humanas. Para hacer conscientes a los estudiantes de las fuerzas históricas que moldean su propia sociedad, propuso enseñar la historia desde el presente hacia el pasado. Si se enseñaba como un proceso de descubrimiento, la historia era idónea para crear ciudadanos activos y responsables en lugar de pasivos receptores de «la verdad oficial o supuesta de su época». Como es lógico, Altamira criticaba la enseñanza libresca, que calificó de «dogmática, cerrada y seca». Sin embargo, admití­a la utilidad de los manuales rigurosos y los libros de lectura interesantes para complementar las clases prácticas que impartirí­a profesores bien formados."

Obviamente, a Altamira no se le hizo ni caso, ni los progresistas que le ensalzaban como mentor, pero no aplicaban sus ideas; ni mucho menos los reaccionarios que procuraron que cayera en el olvido. Pero como la historia es dura para la carcundia, terminaron aceptando -sin saberlo- algunos de sus postulados cuando sacaron la Ley General de Educación de 1970, en las que siguiendo propuestas europeas (de raí­ces marxistas muchas de éllas) convinieron en dar una educación más participativa que memorí­sticia y más globalizada que aferrada a esencialismos, pero no pudieron dejar de meter su puyita y buscaron potenciar las enseñanzas "prácticas y útiles para la vida"  o dicho de otra manera minimizando cualquier asignatura o contenido que éllos consideraran teorizante, que está muy feo que los niños piensen por su cuenta.