Libros 2010 Una Odisea en el Tiempo, o, ¿a qué huelen los libros?

[_Amazonia_]

Yo no leo, es decir...intento no impregnarme de nada externo que pueda condicionarme, asi pues no podre ir al renombrado club del libro a no ser...que alli se puedan intercambiar Mortadelos y Filemones.

(Aqui deberia de haber un hilo de quien se pelea con quien, soy nueva y no me entero muy bien)

Por cierto Carson...estas navidades he decidido añadir a mi vida una nueva experiencia, voy a hacerme amiga de un inmigrante y lo digo en serio)

Hola ¡¡

[Dan]

Habrí­a que crear una nueva regla en plan "si te inventas un personaje, al menos no digas gilipolleces".

[ferdinand]

Pedazo follón se ha montado en este hilo, para que luego digan que sólo el fútbol levanta pasiones y que los de los libros somos unos atemperados. Como buena folklórica, al igual que Mozart, le di una puntada a la bata de cola, di la vuelta ante el respetable y me dirigí­ con la barbilla alta a mi camerino. Lo que no quita â€"lo confieso- que he estado espiando por un agujero del telón.

Para quien sólo se haya quedado con la coplilla de los ritmos jazzí­sticos en los beat, lo del flamer o la vitrocerámica de inducción, aquí­ va un resumen sucintí­simo:

Parafraseo a Flaubert para expresar la grandí­sima impresión que me está causando la lectura de 2666. Por supuesto cuando utilizo su frase, lo hago en el sentido que el francés debió de utilizarla con respecto a Tolstoi, como una forma de entusiasmo ante las letras de un gran escritor. Aparece antibalas con la táctica de siempre: preguntita con visos de ingenuidad. Respondo con cierta malicia. El replica con argumentos y cordialidad. Todo en orden.

Luego tengo la feliz ocurrencia de expresar que hay autores que tienden más al inductismo y otros a la deducción (como, ahora que lo pienso, también pasa en pintura, por ejemplo). Vale que la idea es muy reduccionista, como quien describiera morfológicamente al género humano por altos o bajos, una simple categorización. Entonces aparece la puntillosa Mozart a cuestionar si un bajo espigado no parece alto o un alto chaparro no entrarí­a en la categorí­a de los bajos. En este punto yo me estaba divirtiendo. Pensaba para mí­, por supuesto que Rilke es inductivo. Como la tozudez de Mozart no tiene parangón, y pensando que antibalas seguí­a la onda, le repliqué con ejemplos privados. Dios, qué fue lo que dije. Para folklórica antibalas, hablando de sí­ misma en tercera persona, utilizando mayúsculas didácticas para dejarme las cosas muy claritas. Vamos, una reprimenda pública por no haber entendido sus sabias palabras. Pensé: a la mierda, bonito. Van muy equivocados los que consideran que la elegancia es una cuestión de formas, también lo es de contenido

Mozart, erre que erre, un mano a mano con Doppel que me entretuvo pero sobre el que no podrí­a posicionarme por escasez de conocimiento. Mozart en su lí­nea de cabezonerí­a y Doppel rebatiendo. Coño, aparición estelar de antibalas. El Robin Hood de las letras defendiendo a la damisela ultrajada (a Doppel, eh, no vayamos a confundir). Mozart, claro, molesta por esa irrupción en la que la atacaba. Entre muchos de los vaivenes dialécticos, antibalas pilló la parte para invalidar el todo. Ferdinand encantado, hasta le dedicó un guiño areopagita que el inteligentí­simo antibalas no pilló. 

Mañana, si acaso, ya hablaré estrictamente de libros. Colette me tiene embelesada. Y yo que la tení­a por esas autoras a las que supones que la biografí­a personal supera la obra.

"Kerouac" es un botón. Lo pulsas, y suena "Porquecontigovibro", politono de Rocí­o Jurado, que en paz descanse.

[Ariete]

Pedazo follón se ha montado en este hilo, para que luego digan que sólo el fútbol levanta pasiones y que los de los libros somos unos atemperados. Como buena folklórica, al igual que Mozart, le di una puntada a la bata de cola, di la vuelta ante el respetable y me dirigí­ con la barbilla alta a mi camerino. Lo que no quita â€"lo confieso- que he estado espiando por un agujero del telón.

Para quien sólo se haya quedado con la coplilla de los ritmos jazzí­sticos en los beat, lo del flamer o la vitrocerámica de inducción, aquí­ va un resumen sucintí­simo:

Parafraseo a Flaubert para expresar la grandí­sima impresión que me está causando la lectura de 2666. Por supuesto cuando utilizo su frase, lo hago en el sentido que el francés debió de utilizarla con respecto a Tolstoi, como una forma de entusiasmo ante las letras de un gran escritor. Aparece antibalas con la táctica de siempre: preguntita con visos de ingenuidad. Respondo con cierta malicia. El replica con argumentos y cordialidad. Todo en orden.

Luego tengo la feliz ocurrencia de expresar que hay autores que tienden más al inductismo y otros a la deducción (como, ahora que lo pienso, también pasa en pintura, por ejemplo). Vale que la idea es muy reduccionista, como quien describiera morfológicamente al género humano por altos o bajos, una simple categorización. Entonces aparece la puntillosa Mozart a cuestionar si un bajo espigado no parece alto o un alto chaparro no entrarí­a en la categorí­a de los bajos. En este punto yo me estaba divirtiendo. Pensaba para mí­, por supuesto que Rilke es inductivo. Como la tozudez de Mozart no tiene parangón, y pensando que antibalas seguí­a la onda, le repliqué con ejemplos privados. Dios, qué fue lo que dije. Para folklórica antibalas, hablando de sí­ misma en tercera persona, utilizando mayúsculas didácticas para dejarme las cosas muy claritas. Vamos, una reprimenda pública por no haber entendido sus sabias palabras. Pensé: a la mierda, bonito. Van muy equivocados los que consideran que la elegancia es una cuestión de formas, también lo es de contenido

Mozart, erre que erre, un mano a mano con Doppel que me entretuvo pero sobre el que no podrí­a posicionarme por escasez de conocimiento. Mozart en su lí­nea de cabezonerí­a y Doppel rebatiendo. Coño, aparición estelar de antibalas. El Robin Hood de las letras defendiendo a la damisela ultrajada (a Doppel, eh, no vayamos a confundir). Mozart, claro, molesta por esa irrupción en la que la atacaba. Entre muchos de los vaivenes dialécticos, antibalas pilló la parte para invalidar el todo. Ferdinand encantado, hasta le dedicó un guiño areopagita que el inteligentí­simo antibalas no pilló. 

Mañana, si acaso, ya hablaré estrictamente de libros. Colette me tiene embelesada. Y yo que la tení­a por esas autoras a las que supones que la biografí­a personal supera la obra.

Hablar de novelas y poesí­a se ha demostrado que sólo lleva a la crispación y a la violencia (verbal, pero por imposibilidad fí­sica de la otra). Creo que para calmar los ánimos deberí­amos pasar a discutir un poco sobre terrorismo, conflicto palestino-israelí­, guerra civil y pena de muerte. Con partidarios y detractores de cada bando. Pero por Dios no más discusiones sobre poesí­a y aliteraciones, que mira a donde llevan.

[Bic]

no podre ir al renombrado club del libro a no ser...que alli se puedan intercambiar Mortadelos y Filemones.

Se puede.

(Aqui deberia de haber un hilo de quien se pelea con quien, soy nueva y no me entero muy bien)

Todos con todos.

Y yo vení­a a comentar un libro muy chungo que me ha dejado muy mal cuerpo, pero si eso ya mañana...

P & L

[Rednuts]

Escanéate las tetas.

[Dolordebarriga]

A mí­ me asombra y apena ver como una discusión sobre el to beat or not to beat que dirí­a Chespir puede acabar con tanta mala baba y suicidios masivos. Además entre foreros que aprecio, de los que aportan, una lástima tú, pero yo vengo aquí­ a hablar de mi libro.



Trilogí­a sucia de La Habana de Pedro Juan Gutiérrez

Tres compendios de relatos cortos de un mismo autor unidos en un sólo volumen, la Trilogí­a sucia de la Habana. Bastante autobiográfico aunque con invento de por medio, bueno eso dice su autor. Los relatos son  de tres o cuatro páginas, la mayorí­a en primera persona y con el autor de protagonista, siempre con mucha miseria, mucha jodedera y mucho alcohol. Muy vivos, muy cercanos, muy salvajes, totalmente amorales. Un tipo mezquino y jodido que las pasa putas para tirar palante en la Cuba de mediados de los 90, cuando estaba bien dura  la crisis de los balseros, Pedro Juan es un tipo que hace lo que sea para tener algo de plata, y poder follar (templar)  y beber, que son sus dos grandes ambiciones. Le es indiferente quien caiga por el camino, mientras el siga pudiendo follar y  beber. Los relatos son buenos, Pedro Juan Gutiérrez escribe tremendamente bien, sabe condensar de puta madre una anécdota, una vivencia, una imagen de como se vive la vida en La Habana en tres páginas. No hay ningún relato malo o que te aburra.  Tetalmente recomendable a los flanes de Bukowski y los que gusten de la literatura tropical.

[Carson_]

Hablar de novelas y poesí­a se ha demostrado que sólo lleva a la crispación y a la violencia (verbal, pero por imposibilidad fí­sica de la otra). Creo que para calmar los ánimos deberí­amos pasar a discutir un poco sobre terrorismo, conflicto palestino-israelí­, guerra civil y pena de muerte. Con partidarios y detractores de cada bando. Pero por Dios no más discusiones sobre poesí­a y aliteraciones, que mira a donde llevan.
[/quote]

Ya te digo, ya van dos foreros a los que habrí­a arañado de tenerlos enfrente.

(Me temo que no aprenderé nunca a citar bien).

[Carson_]

Escanéate las tetas.

Que el número de mensajes no te confunda. No soy nueva.

[Carson_]

A mí­ me asombra y apena ver como una discusión sobre el to beat or not to beat que dirí­a Chespir puede acabar con tanta mala baba y suicidios masivos. Además entre foreros que aprecio, de los que aportan, una lástima tú, pero yo vengo aquí­ a hablar de mi libro.

Mira que llevo años foreando, pero algunos desencuentros me siguen dejando muy mal cuerpo, sobre todo si aprecio al forero en cuestión. Que ésta es otra, ¿se puede sentir aprecio por alguien sin rostro con quien apenas has intercambiado unas frases ante la pantalla? Sí­, supongo que sí­.

Bueno, al tema.

Caní§ó de bressol, Chuck Palahniuk. Un periodista investiga algunos casos de muerte súbita en bebés. Pronto averigua que son debidas a la lectura de los versos de una nana, de manera que quien pronuncia el estribillo acaba matando al otro. Ignoro si Palahniuk con este material querí­a escribir una especie de alegorí­a (¿de qué?, a veces parece que de los tiempos modernos, otras de la imposibilidad del silencio), el caso es que hacia la página 80 lo he abandonado. No me ha despertado el más mí­nimo interés.

Chéri, Colette. Amorí­os entre una mujer madura y un jovencí­simo muchacho, el hijo de una amiga.  El tema, muy original no es. Sin embargo juega con elementos interesantes: ella, una especie de cortesana, no representa a la mujer cincuentona impresionable que agasaja y mantiene a su joven amante; por otro lado, él, tampoco ejemplifica la ingenuidad, un bon vivant con un sentido muy terrenal de las cosas. Lo que me ha encantado es la planificación de las escenas, cada capí­tulo, cada escena logradí­sima en términos dramáticos, funciona como los actos de una obra de teatro. Repetiré, una autora a la que llevaba años postergando.

Se me olvidaba, Chéri contiene además una estupenda introducción (1910-1920: La década de la Gran Guerra) a cargo de un tal John William Wilkinson que sitúa la redacción de la obra con los acontecimientos convulsos que estaban sucediendo, no sólo en el ámbito polí­tico, también artí­stico y filosófico.

[45rpm]

de hecho lo folklórico es derribar mitos. No tanto por derribarlos, sino por elevarlos.

[_Amazonia_]

A mí­ me asombra y apena ver como una discusión sobre el to beat or not to beat que dirí­a Chespir puede acabar con tanta mala baba y suicidios masivos. Además entre foreros que aprecio, de los que aportan, una lástima tú, pero yo vengo aquí­ a hablar de mi libro.

Mira que llevo años foreando, pero algunos desencuentros me siguen dejando muy mal cuerpo, sobre todo si aprecio al forero en cuestión. Que ésta es otra, ¿se puede sentir aprecio por alguien sin rostro con quien apenas has intercambiado unas frases ante la pantalla? Sí­, supongo que sí­.


No, vamos...yo creo que no.

[Carson_]

de hecho lo folklórico es derribar mitos. No tanto por derribarlos, sino por elevarlos.

Ya, pero a falta de contexto, en qué sentido lo expresas. ¿Que folklórico no es un término peyorativo?

[_Amazonia_]

de hecho lo folklórico es derribar mitos. No tanto por derribarlos, sino por elevarlos.

Ya, pero a falta de contexto, en qué sentido lo expresas. ¿Que folklórico no es un término peyorativo?

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Para mi que lo que esta haciendo mrp45 es intentar justificar a Antibalas, si yo quiero elevarte te llamare Diosa, si te llamo follklorica es para devaluarte.

Conclusion, uno te devalua y el otro lo justifica.

Eso es lo que yo extraigo, aunque igual...soy una cabrona malpensada.

[Carson_]

Calla, calla, Amazonia. Te lo digo porque te "aprecio".