A vueltas con los jóvenes y jóvenas

Iniciado por Tejemaneje, Febrero 02, 2007, 09:13:01 AM

Tema anterior - Siguiente tema

Don Pésimo

Cita de: lukera en Febrero 02, 2007, 03:03:02 PM
Intervengo brevemente para dejar constancia de mi indignación ante la afirmación de que las mujeres no sepamos usar un talabro o cambiar una broca. Y lo afirmo con todas las lecturas posibles que se les ocurra a los machos.

Sobre lo que dice D. Pésimo sobre enchufes y bombillas, normalmente tan acertadamente, recordarle que en las ferreterí­as aún se venden mecanismos compuestos denominados machos o hembras según tengan la parte a conectar para afuera o para dentro (agujeritos).

Otro ejemplo de tropo al servicio de la semántica.
Me cago en el Sistema Solar

lukera

Olivia, si no sabes usarlo seguramente es porque no te has visto en la necesidad o no te ha apetecido intentarlo. Eso es como los tipos que dicen no saber planchar o poner una lavadora. Mas que ignorancia o incapacidad yo lo llamo jeta.

A sus pies como siempre, Don Pésimo.

Belial

Yo sí­ lo uso, pero aún no he sentido el Poder del Auténtico Macho recorrer mi cuerpo desde el brazo cada vez que lo empuño. Igual es que el mí­o está averiado.

laura_m

Cita de: Belial en Febrero 02, 2007, 03:34:35 PM
Yo sí­ lo uso, pero aún no he sentido el Poder del Auténtico Macho recorrer mi cuerpo desde el brazo cada vez que lo empuño. Igual es que el mí­o está averiado.

Yo lo que siento recorrer mi cuerpo cuando no me quedan más narices que cojer la black & decker (artilugio que existiendo el "cuelga-fácil" resulta cada vez más prescindible, por otra parte), es una creciente sensación de cabreo. Es un coñazo, ensucia muchí­simo y hace un ruido de mil demonios.

En cambio el uso que puede dársele como destornillador eléctrico (al menos la que yo tengo) lo encuentro sensacional.

Belial

Cita de: laura_m en Febrero 02, 2007, 03:38:24 PM
Yo lo que siento recorrer mi cuerpo cuando no me quedan más narices que cojer la black & decker (artilugio que existiendo el "cuelga-fácil" resulta cada vez más prescindible, por otra parte), es una creciente sensación de cabreo. Es un coñazo, ensucia muchí­simo y hace un ruido de mil demonios.

En cambio el uso que puede dársele como destornillador eléctrico (al menos la que yo tengo) lo encuentro sensacional.

Sí­, eso es uno de los grandes inventos infravalorados de la Humanidad.

PD: Pues cuando has de hacer el agujero en el techo no veah. Y después colger tú solo la puta lámpara, aguantándola con un brazo, mientras intentas hacer el empalme con el otro, destornillador en ristre...



Olivia

Yo si puedo evitarlo, no uso ese cacharro que me deja sorda perdida y además pesa mucho y me tiembla el brazo al sostenerlo. Y sí­, parte de mi estrategia para no usarlo es lograr que amigos y novios lo usen, sin por ello sentirme ni machista ni hostias, aunque sí­ sintiéndome muy economista, que hace ya siglos que David Ricardo habló de la importancia de las ventajas comparativas de cada uno. Yo las mí­as las tengo claras.


Dan

Hace un rato me ha dicho mi mujer que el cuadro que tenemos por ahí­ tirado... lo tenemos que colgar. Mwahahahahasniffff.

laura_m

Cita de: Dan en Febrero 02, 2007, 05:30:40 PM
Hace un rato me ha dicho mi mujer que el cuadro que tenemos por ahí­ tirado... lo tenemos que colgar. Mwahahahahasniffff.

Cuelga fácil, Dan. Cuelga fácil. Sencillo, rápido y limpio. La taladradora para eso es un atraso.

Imparable

Donde esté un señor tojino metido hasta media pared que se quite una mierda de chinchetita.

Dan

Lo siento, lo llevo en los genes.
Y cada vez que suena ese plural mayestático (ella tiene la maiestas y yo oro et laboro, claro) es un clavo más en el ataúd de mi juventud perdida. Pero en el fondo me gusta.

Vamos, lo que dice Imparable. Que no pongo yo un pedazo de cuadro sobre mi cabecero con esas cosillas. Que con una operación de tabique, basta. Y al menos la otra vez tení­a unas razones para el médico recias, varoniles... si me pasa eso, qué le digo, eh, qué le digo.

Scardanelli



- ¡Están locas estas andaluzas!


La ingenierí­a gramatical con la que el feminismo más bobo persigue un arreglo ideológico del idioma, en su justo convencimiento de que el machismo lingí¼í­stico es un reflejo del machismo social, pasa siempre por alto que la manipulación consciente de las palabras, con el fin de adaptarlas a una doctrina sectaria, no transforma la realidad en el sentido deseado sino que deforma su representación, del mismo modo que la neolengua del sistema totalitario imaginado por Orwell busca el maquillaje del mal social, el exterminio de aquellos términos que describen las situaciones que la ideologí­a dominante desea eliminar. El éxito en el futuro de tales medidas correctoras no comportarí­a la desaparición del machismo real sino su ocultación, su olvido, su oscurecimiento. El triunfo caerí­a paradójicamente del lado del enemigo que se combate, puesto que el usuario de este idioma higienizado, purgado de groserí­as y desligado de las relaciones realmente existentes, tendrí­a la impresión de que el problema ya está resuelto, al carecer de pruebas evidentes de su existencia, volviéndose ciego para detectar la injusticia sexual. Las contradicciones sociales permanecerí­an, pero habrí­an quedado conciliadas en un lenguaje angélicamente falsificador, ya incapaz de dar cuenta del mal del mundo y de recogerlo en su estructura.

Mejorando a la fuerza y de antemano la palabra, se independiza de ella la cosa de la que es imagen. Cuando mejore la cosa, mejorará por sí­ sola la palabra que la sigue.
Como dize Aristótiles, cosa es verdadera,
el mundo por dos cosas trabaja: la primera,
por aver mantenení§ia; la otra cosa era
por aver juntamiento con fenbra plazentera.

Don Pésimo

Hola, aprovecho que he podido conectarme con mi portátil a la wifi de la escuela de gaitas y kilts (cuya fragoneta pueden ustedes contemplar en la foto adjunta, primicia para el areópago) para reflotar este hilo y añadir un elemento de reflexión, si es que el uso de tal palabra no es un oxí­moron en el contexto de este nuestro forúnculo.

Resulta que esta mañana, tomando el té en un descanso de clase, he descubierto que en inglés se considera polí­ticamente incorrecto el uso de sustantivos especí­ficamente femeninos. Es decir, se considera polí­ticamente correcto el uso de actor en lugar de actress para referirse a una actriz, por ejemplo.

Pues eso, que qué curioso.

Me cago en el Sistema Solar